Las altas tasas de paro que se siguen registrando en España obligan a miles de personas a seguir buscando ofertas de trabajo por Internet. Las estafas laborales a través de la red están presentes desde hace años, pero en los últimos tiempos se ha producido un incremento en las estafas en torno al phishing y el blanqueo de capitales, publica Que.es
Según un estudio publicado por Addeco, España se sitúa a la cabeza de los países que buscan empleo a través de Internet. Un 69% de los usuarios sobre el total de las personas que buscan trabajo activamente.
La necesidad de encontrar trabajo es lo que lleva a los desempleados a ser el principal objetivo de los estafadores. A través de Internet y de las redes sociales han proliferado las estafas laborales que prometen trabajos con incorporación inmediata o remuneraciones muy superiores a la media del mercado, y que lo único que pretenden es aprovecharse de la desesperada situación de los parados.
Los últimos datos publicados por el Instituto Nacional de Ciberseguridad (INCIBE) señalan que cerca del 25% de los fraudes que hay actualmente en Internet provienen de ofertas de empleo falsas. Generalmente, este tipo de estafas intenta engañar a los usuarios para que terminen realizando una transferencia de dinero en beneficio de la empresa supuestamente contratante, obtener datos personales de forma irregular o convertir al aspirante a un puesto de trabajo en una mula que actúa de intermediario para blanquear dinero o desviarlo, enviándolo al extranjero para dificultar la investigación policial.
Dani Creus, analista de malware de Kaspersky Lab explica que “este tipo de delito consiste en enviar correos electrónicos de forma masiva ofreciendo trabajo desde casa y lo disfrazan como ‘agente de cobros“. Además, Creus señala que este tipo de delitos “van en aumento” y aunque la población se vayan haciendo eco de ellos, los cibercriminales “siempre sacarán una nueva forma de engañar“.
Cuando estas ‘mulas’ llevan a cabo las transacciones de dinero, se llevan una comisión. Para ello, los estafadores envían a la cuenta corriente del candidato grandes sumas de dinero que debe reenviar a otras cuentas, descontando su comisión. Se trata de un fraude muy peligroso, ya que el candidato puedeincurrir en un delito de blanqueo de capitales con graves consecuencias legales.
Cómo detectar si una oferta de trabajo es falsa
La revista Forbes publicó una lista con las señales más comunes que advierten de que una oferta de empleo en Internet es falsa. Entre estas advertencias están que pidan los datos bancarios por adelantado, que las funciones no sean las acordadas, que prometan un salario muy alto, demasiadas facilidades, que garanticen un curso de formación, que no haya información de la empresa o que haya que pagar a la empresa.
Dani Creus nos cuenta que estas ofertas destacan por ser “poco sofisticadas” y contener una “redacción pésima“. “Aunque hay quienes quieren parecer más sofisticados y abren una empresa en otro país donde este proceso sea más sencillo y aparentemente parezcan legales”, explica.
Creus explica además que estos tipos de delitos están relacionados. Se trata de “cibercrimen económico“, es decir, cuando se hace phishing y se roban credenciales bancarias luego hay que mover ese dinero, y es cuando se envían esos correos masivos para utilizar a las mulas para hacer transferencias. “La finalidad de estos cibercrímenes es lucrarse económicamente“.
Por lo tanto, cuando se recibe una oferta de trabajo conviene asegurarse de que la propuesta proviene de una empresa fiable, y no dejarse llevar por oportunidades laborales que no son claras. Como medida de precaución, la búsqueda de empleo en la Red debe hacerse a través de portales web de confianza y oficiales, que garanticen la protección de los datos del candidato.
Las propuestas de empleo fraudulentas incluyen direcciones de correo electrónico con dominios generalistas (hotmail, yahoo, gmail, etc.) a las que el candidato debe enviar su currículum. Por el contrario, las empresas fiables suelen contar con dominio propio en Internet y, por tanto, tienen cuentas de correo asociadas al mismo.
Se debe prestar especial atención a cualquier síntoma que pueda sembrar la desconfianza, como la falta de información acerca del puesto de trabajo. Además, tampoco hay que realizar llamadas a determinados números de teléfono de tarificación adicional, ni enviar mensajes SMS para optar a un trabajo.
Cómo actuar ante una estafa laboral
Dani Creus explica que se puede actuar de forma distinta en función de lo que se haya llegado a hacer. Es decir, “si simplemente se trata de la recepción de un correo electrónico de estas características, desconfiar, comprobar que la empresa tiene página web y buscar un poco el contexto de este correo“.
Si, por el contrario, ya has aceptado el ‘trabajo’ y has comenzado a hacer transferencias, lo cual incurre en un delito, “lo mejor es dirigirse al grupo de delitos telemáticos y explicar los hechos“, explica el analista.
De igual modo, Creus diferencia entre aquellas “personas que saben que están cometiendo un delito pero les da igual, y otras que no lo saben y son víctimas de un entramado que busca lucrarse económicamente“.