“Fue sin querer queriendo” Roberto Gómez Bolaños (Chespirito)
La ocasión imponía un artículo más que serio, categórico, pues el Ministerio Público había admitido errores procesales en contra de mi defendido, el empresario y político yaracuyano Kamel Salame Ajami, lo hizo ante la Presidenta del Tribunal Supremo de Justicia, obligado por una orden expresa de la Sala Constitucional a la Fiscal General de la República, como resultado de una acción de amparo constitucional que interpuse por la conducta omisiva de la vindicta pública en el caso de este ciudadano, quien fue privado de libertad presuntamente por estar vinculado con el tráfico de drogas, presunción por la cual lleva 9 años preso, despojado de todos sus bienes muebles e inmuebles, apartado de su familia, en especial de sus menores hijas, y consumido por un crítico estado de salud sin derecho a atención médica especializada.
La respuesta que el 17 de este mes la Fiscalía General de la República le dirigió a la Dra. Gladys María Gutiérrez Alvarado, tornó a este artículo en querellante, porque lo único que faltó en ese documento fue la célebre frase del Chavo del 8, nuestro querido Roberto Gómez Bolaños (Chespirito), quien hoy pasó a mejor vida: “Fue sin querer queriendo”, porque en síntesis a eso se resume el oficio N° DGDCDO-1418-2014 (066535), cual parodia de los encontronazos que aun hoy día nos deleitamos viendo en la Vecindad del Chavo, pero más que una parodia es una sátira con una sarta de comediantes que ya empiezan a recular a sabiendas de que KAMEL SALAME NO ES NARCOTRAFICANTE, participes de un ardid que involucró a personeros tanto de la MUD como del PSUV, que en Yaracuy dieron lugar al develado descaro judicial que los deja al descubierto como artífices de un vil ensañamiento.
Julio César León Heredia, Gobernador del estado Yaracuy, junto a su entorno familiar, laboral y partidista, de la mano del otrora infalible, Wilmer Alvarado, Héctor Francisco Carmona, Carlos Vielma, Jorge Castro (Director de Noticias Candela), Joaquín Bazan y Said Gregorio Schwarz Santoni, es el principal responsable del forjamiento de la acusación contra Kamel Salame por narcotráfico, fue él quien públicamente afirmó tener pruebas en su contra, mintiendo descaradamente, como lo hizo su corre ve y dile, Víctor Moreno, Coordinador Regional de Primero Justicia, en cuanta reunión de la MUD tuvo oportunidad de participar en Caracas, secundado por el Coordinador Regional de la MUD Yaracuy, Antonio Dyurich, quien a patadas echó de su oficina a partidarios de Salame, gesto que emuló Pedro Manuel Rivas, de Acción Democrática en una reunión de la Mesa Municipal de la Unidad de San Felipe, actitudes que esperamos deje atrás la actual coordinadora yaracuyana de la MUD, quien además de penalista se ha caracterizado por ser defensora de los derechos humanos.
En complicidad, los rojos y opositores yaracuyanos propiciaron una matriz de opinión adversa a Kamel en los altos círculos de poder del país, extendiéndola a todas y cada una de las fuerzas políticas, así como a todos los medios de comunicación, con honrosas excepciones, digo, entre políticos y comunicadores sociales. Felonía posicionada gracias a un proceso judicial amañado, etiquetado por Jesús José Capote, por desgracia yaracuyano y pieza de Aponte Aponte en la Fiscalía, como un juicio por narcotráfico que radicaron en el Circuito Judicial del estado Aragua, mejor conocido como la guillotina judicial del país, donde en 5 años ninguna de las acciones de la defensa prosperó hasta que recurrí a la Sala Constitucional del TSJ, vía amparo, y cuál es mi sorpresa, cuando la Fiscalía General de la República respondió “Fue sin querer queriendo” que le endosamos el calificativo de NARCOTRAFICANTE al señor Kamel Salame, palabras más, palabras menos, eso fue lo que quisieron decir con su jerigonza devenida en admisión de un hecho bochornoso en “un Estado democrático y social de Derecho y de Justicia”.
Manipularon los hechos para presentar a Kamel Salame ante la opinión pública como un “delincuente de alta peligrosidad” con alusiones a su “amplio prontuario delictivo”, objetivo que lograron complementando los graves señalamientos en su contra con fuertes dispositivos de seguridad, solicitados por los jueces de la causa, comenzando por Julio César Torres, bajo instrucciones de“Coordinar conjuntamente con los otros Organismos de Seguridad del Estado y tomando las Medidas de Seguridad Extremas, el TRASLADO”, incluyendo solicitud de colaboración a dichos organismos “en el sentido de resguardar las instalaciones de esta sede judicial” en la oportunidad que Kamel Salame fuese a comparecer al Tribunal, instrucciones cumplidas a cabalidad “(…) en atención a su contenido le informo se coordinó con los organismos de seguridad tomar las acciones para el traslado (…)”y con evidentes connotaciones de exageración que se corresponden con esta patraña urdida en contra de Salame “(…) deberán permanecer en ese Centro Penitenciario, (…) con las más estrictas medidas de seguridad, inclusive durante las 24 horas del día de manera consecutiva.”; concepto de peligrosidad potenciado por su presunta vinculación “con el tráfico de drogas” y Walid Makled sugerida por el Ministerio Público y sostenida públicamente por el gobernador Julio León Heredia.
“León dijo que es risible el pensar que su campaña fue financiada por “el narcotraficante Wali (sic) Makled, ya que en todos los informes de inteligenciaconfirmaron que el socio principal era Kamel Salame” (…)”.
La Mesa de la Unidad en Yaracuy adoptó esa percepción de peligrosidad, su reprobación al grupo de electores de Kamel Salame, Sakalos, así lo demuestra. Pedro Manuel Rivas, Armando Barreto yAntonio Dyurich fueron los encargados de rechazar a Sakalos cuando manifestó su intención de incorporarse a esa alianza. Ese comportamiento habría sido inducido por Víctor Moreno, coordinador del “partido aurinegro” en Yaracuy, so pena de ir a la cárcel por corrupto sino cumplía con tal vil cometido.
El artificio jurídico lo sostienen con esta noción de peligrosidad, una mentira que repetida mil veces lograron posicionarla como una verdad en la opinión pública, un montaje con repercusiones nefastas para el proceso judicial, generadora de un daño moral irreparable no sólo a Kamel Salame sino también a su familia, hijas y amigos que se sienten afectados socialmente por esa temeridad, cuyo impacto es posible apreciarlo hasta en el entorno familiar del gobernador Julio León Heredia. La Primera Dama del estado Yaracuy, en entrevista que le hiciera el periodista Jorge Luis Pérez, a la pregunta ¿Tiene miedo a que su esposo le pueda pasar algo malo?, respondió:
“- Si, ya que Julio ha estado combatiendo como Gobernador a toda esa parte delictiva. Ha batallado a fondo con el narcotráfico, con las bandas que atracaban a las gandolas. Por eso, vivo ese miedo siempre-”.
Como lo han sostenido valientemente Lilia Camejo, Theresly Malavé y Osmary Guevara, ante la mofa de sus pares i que defensoras de derechos humanos, así como Malquides Ocaña, Jameiro Aranguren, Enzo Mencia, Miguel Alfredo Bermúdez, Monseñor Baltasar Porras y Monseñor Roberto Luckert, A KAMEL SALAME LO ACUSARON SIN PRUEBAS, sin elementos de convicción que justifiquen el largo presidio que le ha tocado pagar injustamente, por un “UN SEÑALAMIENTO SIN FUNDAMENTO, CON TEMERIDAD, MALA FE Y ESTIGMA SOCIAL a su reputación”, puesto que el Ministerio Público acusó deliberada e irresponsablemente al empresario yaracuyano y lo despojó de todos sus bienes muebles e inmuebles porque presuntamente estaba vinculado al tráfico de drogas, llegando a divulgar tal presunción desde su portal web y difundirlo en diversos medios impresos de circulación nacional.
Desde el 18 de noviembre de este año no aparece en el portal web oficial del Ministerio Público la presunta vinculación con el tráfico de drogas atribuida a Kamel Salame, porque tal y como lo hemos sostenido, en el expediente no había pruebas para sostener tan irresponsable y temerario señalamiento, causante de un perjuicio irreparable a un ciudadano cuyo único delito fue postularse como candidato a Alcalde del Municipio San Felipe del estado Yaracuy y ganar las elecciones en una circunscripción donde hoy casualmente gobierna un cuñado de Julio León Heredia. En un auténtico “Estado democrático y social de Derecho y de Justicia”, que dice construir el Tribunal Supremo de Justicia en su portal web, corresponde dejar en libertad a Kamel Salame tras 9 años de injusto e ilegal encarcelamiento.
Continuará…
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