En Francia los trabajadores no son los únicos que protestan y esta vez fueron los dueños de empresas.
Varios miles de dueños de empresas, particularmente compañías pequeñas, marcharon en París el lunes para pedir al gobierno que simplifique las normas y facilite la contratación y despido de empleados.
Jean-Pierre Hutin, propietario de un hotel, pidió más flexibilidad para el trabajo a tiempo parcial, mientras otros se quejaron de que la cantidad de impuestos y normas laborales hacen imposible que Francia compita a nivel mundial.
Los jefes alegaron que el gobierno necesita que los dueños de empresas contraten más personas. El presidente socialista Francois Hollande ha tratado de flexibilizar las leyes laborales pero los críticos dicen que no ha hecho lo suficiente.
En desempleo en Francia alcanza el 10% y el crecimiento económico se ha empantanado, lo que amenaza con empujar a toda la eurozona de regreso a la recisión. AP