Las Farc calificaron hoy de “mentirosos” y “disparates” los mensajes del expresidente y actual senador colombiano Álvaro Uribe en la red social Twiiter, tras la liberación del general Rubén Darío Alzate. EFE
“Con desagrado tenemos que responder los disparates del senador Álvaro Uribe Vélez, originados en la liberación sin condiciones del General Rubén Darío Alzate”, afirmó hoy en La Habana el jefe de la delegación de paz de las Farc, “Iván Márquez”, en un breve comunicado leído ante los medios.
“Cómo le duele a este hombre sin sosiego, que gestos de paz como una liberación, puedan tornar irreversible el proceso de reconciliación. Seguramente confirmó sus alucinaciones con el hacker de su propia locura”, indicó “Márquez” (alias de Luciano Marín Arango).
La reacción de la guerrilla tiene lugar después de que el jefe del equipo de paz del Gobierno colombiano, Humberto de la Calle, también se refiriera ayer en La Habana a los tuits del senador, quien recientemente dijo que la reanudación de las conversaciones se logró cediendo concesiones a las Farc.
“En un trino (tuit) reciente, el senador Álvaro Uribe publicó supuestos compromisos exigidos por las FARC para reiniciar las conversaciones. Esto ni siquiera fue planteado por las Farc y, en todo caso, si lo hubiera sido, no lo hubiéramos aceptado”, aseveró ayer De la Calle.
Hoy, las FARC destacaron que “todas las propuestas e iniciativas” que han llevado a la mesa de conversaciones con el Gobierno son de “conocimiento público, como también lo son los acuerdos parciales que hasta ahora se han logrado”.
“Lo demás son mentiras y calumnias”, apuntó el mensaje leído por Márquez, en el que los insurgentes califican a Uribe de “nefasto expresidente”.
El Gobierno colombiano y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (Farc) reiniciaron ayer miércoles las negociaciones de paz en La Habana, tras superar la peor crisis enfrentada por el proceso, y provocada por el secuestro del general.
El presidente Juan Manuel Santos suspendió las negociaciones horas después del secuestro, pero las partes enseguida trataron de salir de ese impasse para retornar a la mesa de negociación, lo que quedó resuelto con la liberación de Alzate.
Por otro lado, las FARC continuaron hoy en otro comunicado sus reflexiones sobre el derecho humanitario en conflictos armados, y fijaron posición sobre la “juricidad guerrillera” y los crímenes de guerra.
“Nunca hemos llevado a cabo ataques militares intencionados contra la población civil o contra personas que no hayan participado en el conflicto armado interno”, expresó el texto leído por “Pablo Catatumbo” (alias de Jorge Torres Victoria).
Más adelante la guerrilla consideró que los crímenes del Estado y “sus auxiliadores paramilitares” sí son “graves crímenes internacionales que en su mayoría permanecen en la impunidad”.
Asimismo resaltaron la “juridicidad interna” de sus fuerzas, y el respeto que les ha ganado entre la población que vive en zonas de conflicto.
Precisaron, además, que siempre han aplicado las sanciones correspondientes a los guerrilleros que han incumplido sus normas “especialmente respecto a comportamientos reprochables con la población”.