Carlos Julio Peñaloza: Los pronunciamientos militares

Carlos Julio Peñaloza: Los pronunciamientos militares

thumbnailcarlosjuliopenalozaLa situación nacional se está haciendo tan apremiante que han aparecido algunos calificados oficiales retirados de alto rango a proclamar su oposición al régimen. Otros han preferido mantenerse en “la reserva” observando el desarrollo de los acontecimientos. Estas voces castrenses, en pleno uso de sus derechos políticos  consideran que no es posible un voto limpio en las circunstancias actuales. La misión de todos los venezolanos es liberarnos del yugo castrista por cualquier método. Las posibles alternativas van desde el voto, pasando por la resistencia pacífica, la renuncia de Maduro y en caso extremo hasta la insurrección, basada en el artículo 350 de la Constitución. Ninguna opción debe desecharse, la participación de todos es necesaria, incluyendo a los militares. Aunque algunos de ellos fueron la causa del problema, ahora deben ser parte de la solución. Entretanto la MUD que debería liderizar esta lucha se aísla del país y manteniéndose como un club de partidos con fines exclusivamente  electorales, en lugar de ser un ente inclusivo que luche por la independencia con todos los medios disponibles.

Para agravar las cosas, Nicolás Maduro ni siquiera se ha dignado a presentar su partida de nacimiento. La MUD atemorizada no se atreve a tocar este tema que considera tabú. Al ser cuestionados por su actitud, su respuesta ha sido oprobiosa: “La partida de nacimiento es irrelevante”. De ser esto cierto, la Constitución Nacional también lo sería y Venezuela constituiría una colonia insignificante. La carga de la prueba de nacionalidad recae en el indiciado y no en las autoridades. Hasta que ese sujeto no presente su partida de nacimiento, como lo demanda la Carta Magna, es un indocumentado y no puede ser legalmente presidente.

Los pronunciamientos recientes no están planteando un golpe de estado o lucha armada, sino un movimiento cívico militar para obligar al gobierno a cambiar de rumbo o renunciar. El 83% de rechazo a  Maduro unido al colapso petrolero ha dado pie a varios pronunciamientos que deben unificarse para aumentar su potencia. Exigir cumplimiento de la constitución y expulsión a los traidores es un mecanismo de resistencia válido de defensa de la sociedad. Junto a estas voces se han elevado otras para apoyarlos y pedir que nos unamos. A esas manifestaciones uno mi soporte. Es necesario que los oficiales retirados que claman por la independencia se unan y hagan un equipo con los militares en servicio activo y los civiles de la resistencia para enfrentar a los Castro. Es cierto que en la institución armada hay muchos corruptos e infiltrados que son comunistas fanáticos, pero la mayoría son patriotas. No puede haber resistencia sin ellos.





Entretanto no se debe abandonar el terreno electoral en manos de los chavistas. Esa es otra forma de entregar al país. En las condiciones actuales es imposible para el régimen ganar limpiamente unas elecciones. La única forma en que pueden triunfar es mediante el fraude. Si llegamos a esas elecciones, debemos ir a votar masivamente y luego salir a defender nuestro voto en caso que intenten robarnos.  La única salida no violenta que existe es que el régimen entregue el control de la AN luego de las parlamentarias y  que Maduro renuncie antes para dar paso a un nuevo gobierno democrático de unidad nacional. La reconstrucción no será tarea fácil y necesita el concurso de todos. Si los Castro insisten en cometer fraude la salida será violenta.

Los colaboracionistas del gobierno acusan a los líderes militares de oposición como conspiradores. La conspiración es una conjura secreta para tomar el poder. En el caso venezolano actual no podemos usar ese término porque el tema se aborda en público, en ruedas de prensa por internet y hasta en mítines y manifestaciones populares contra el régimen anti constitucional. Técnicamente hablando, no se trata de una conspiración por que no se hace en secreto, en conciliábulos  ocultos. Obviamente la identidad de los militares democráticos activos no puede rebelarse para evitar purgas. Por ello los militares retirados debemos jugar un papel  protagónico, tal como está ocurriendo. En todo caso los militares en servicio y los jubilados formamos un todo único para luchar conjuntamente con los civiles contra la dominación de los Castro. Todos somos necesarios para liberar a nuestra patria.

Los militares retirados que han adoptado públicamente posiciones contrarias al régimen castro comunista que viola a diario la Carta Magna venezolana son voceros de un sentimiento patriótico. Este grupo con acceso a los medios debe apoyar a los oficiales activos que de ser necesario saldrán un día a defender la Constitución. Los oficiales activos que asuman ese riesgo serán los líderes de un movimiento indetenible que nos hará de nuevo libres. A continuación  me referiré a los más caracterizados de este grupo que se han convertido en portaestandartes de la rebeldía contra los Castro.

Entre los oficiales retirados que han elevado su voz en defensa de la Constitución y de la patria está el general Angel Vivas quien recientemente hizo un fervoroso pronunciamiento a favor de la democracia  y en contra del régimen. Este oficial además de ser un hombre muy bien preparado ha tomado posiciones en el pasado que lo han convertido en un héroe popular. Conocida es su rechazo al uso dentro de las FAN al lema “! Patria, Socialismo o Muerte, Venceremos!”. Esta consigna castrista fue instaurada en el Ejército por Hugo Chavez. Por esta valiente actitud ha sido perseguido y en el proceso ha dado demostraciones de gran valor personal. Durante su permanencia en el Ejército fue uno de los hombres de confianza del general Raúl Baduel.

Baduel por su parte es un oficial muy serio con gran ascendiente profesional que dejo muchos seguidores en el Ejército. Formó parte de la logia de Chávez pero al no estar de acuerdo con el plan del golpe se retiró y no participó en la asonada. Al llegar al poder Chavez lo ascendió a general. Siendo Comandante de la Brigada de Paracaidistas fue responsable por la liberación de Chavez luego del golpe del 2002. En recompensa recibió el Comando del Ejército y el Ministerio de la Defensa. Luego de su retiro se manifestó contrario a la reforma constitucional promovida por Chavez. Dada su popularidad y el número de seguidores militares, Baduel fue acusado de corrupción por el régimen y arrestado. Actualmente paga condena en la Cárcel de Ramo Verde.

El almirante Iván Carratú Molina es otro oficial con buena formación académica. Siendo Jefe de la Casa Militar de Carlos Andrés Pérez tuvo una actuación destacada durante la noche del 4F.  Gracias a el Pérez logró escapar de Miraflores. Luego de la defenestración de CAP, Carratú fue acusado de corrupción por un delito que no podía cometer y fue detenido. Posteriormente fue dejado en libertad y se ha convertido en fiero opositor al gobierno revolucionario. Actualmente pesa sobre él una orden de captura por subversión y vive en los EEUU. En el exilio ha hecho equipo con el político Alberto Franceschi creando la organización política civil y militar  denominada “Un Nuevo Orden” (UNO). Según Carratú su movimiento es un grupo político no electoral que no se propone ir a elecciones, ni aspira a cargos públicos.

El general Néstor González González es un oficial del Ejército que tuvo una participación destacada en el golpe de abril del 2002. Cuando Chávez fue llevado detenido a la Comandancia del Ejército a medianoche del 11 de abril fue uno de los oficiales más caracterizados al exigir la renuncia del presidente ordenando despojarlo del uniforme que portaba, al cual no tenía derecho. Al regresó de Chavez al poder González pasó a la clandestinidad reapareciendo en la Plaza Altamira. Posteriormente fue al exilio y vive en Costa Rica. Este general goza de gran prestigio dentro de las FAN.

El general Antonio Rivero es otro oficial ejemplar que ha dado amplias muestras de valor personal y patriotismo. Además de tener amplios méritos académicos es un conocido defensor de la democracia, ha estado detenido y está llamado a jugar un papel relevante en la resistencia. Actualmente está en la clandestinidad en Venezuela. Suscribo su mensaje de apoyo al Gen. Vivas en su pronunciamiento.

Además de los oficiales retirados mencionados,  en servicio activo hay otros que rechazan la actitud entreguista del régimen. Ellos al igual que la mayoría de los venezolanos  sueñan  con expulsar a los castro comunistas y restablecer la democracia. Esto requiere que todos los líderes militares y civiles nos unamos en un ente similar a la Junta Patriótica creada para enfrentar al general Pérez Jimenez. Este paso es indispensable para asegurar la victoria. Unidos venceremos, divididos caeremos. Cuenten todos los líderes anticastristas con este modesto soldado para cualquier actividad donde puedo ser útil. Todos debemos luchar unidos para rescatar la patria de las garras de los Castro.