El Banco Central de Venezuela (BCV) acumula tres meses de atraso en la difusión de los datos de inflación, la más alta de América Latina, que en agosto se ubicó en 63,4 por ciento en su versión anualizada según el reporte del ente oficial, publica el Correo del Caroní.
Desde entonces, la dinámica dilatoria en la publicación de las cifras se ha extendido casi como una política de Estado desde finales de 2013, contraviniendo la propia normativa de BCV que manda la publicación de los datos los primeros 10 días de cada mes.
Analistas económicos estiman que 2014 cerrará con una inflación de tres dígitos.
El último informe del Centro de Documentación y Análisis de la Federación de Maestros (Cendas) apunta que la Canasta Básica Familiar se ubicó, para noviembre de 2014, en Bs. 28.141,50, Bs. 1.565,46 más con respecto al mes de octubre.
Un cálculo con respecto a noviembre de 2013 resulta un aumento de 87,6 por ciento, es decir, Bs. 13.137,21. En total, concluye el Cendas, se requieren 6,6 salarios mínimos para poder adquirir la canasta básica.
La publicación de las cifras tienen como precedente los señalamientos del presidente de la República, Nicolás Maduro, quien en noviembrede 2013 criticó a la “tecnocracia” del BCV que esperaba que la inflación de ese año se ubicara en -5%.
“En noviembre, de acuerdo a los estudios que estamos haciendo, la inflación debería ser -5%, como mínimo, porque si habían inflado un producto y lo vendían en mil bolívares y ahora cuesta quinientos o cuatrocientos bolívares, algo ha pasado. ¿Se darán cuenta los técnicos del BCV y del INE más allá de la tecnocracia?”, dijo en ese entonces.
El economista y profesor de la Universidad Católica Andrés Bello, Orlando Ochoa, inquirió este viernes sobre el retraso: “¿Entenderá Maduro que al no permitir al BCV publicar estadísticas económicas no encubre la crisis pero si eleva percepción de riesgo país?”, a través de su cuenta en Twitter.
Para Ochoa el ocultamiento de los datos sólo eleva el costo de financiar a la república, al tiempo que el Gobierno espera lograr acceso a mercados financieros globales.
La elevada inflación y la escasez de productos fueron algunos de los detonantes de las protestas en el primer trimestre de 2014. Según el Cendas, 25,9% de productos de la Canasta Básica Familiar registran escasez.