El papa Francisco deseó hoy que el sacrificio de los actuales “mártires”, perseguidos por ser cristianos, refuerce el empeño para asegurar la libertad religiosa en todo el mundo, durante el rezo del Ángelus en la Plaza de San Pedro.
“Recemos para que gracias al sacrificio de estos mártires de hoy en día se refuerce en cada parte del mundo el empeño para reconocer y asegurar concretamente la libertad religiosa que es un derecho inalienable de cada persona”, explicó.
Durante el mensaje de hoy, que se celebra San Esteban, primer mártir de la Iglesia católica, el pontífice argentino explicó que “no todos los cristianos son llamados a verter su sangre como San Esteban, pero cada cristiano debe ser coherente con las circunstancias de la fe que profesa”.
“No se puede ser cristiano y vivir como un pagano”, instó el papa a los fieles, a quienes pidió “coherencia”.
También exhortó hoy a los fieles que rezasen “de manera particular por los que son discriminados y asesinados por ser testigos de Cristo”.
“Quiero decir a cada uno de ellos, si lleváis esta cruz con amor, habéis entrado en el misterio de la Navidad, en el corazón de Cristo y de la Iglesia”, agregó.
A los católicos les instó además a “dar testigo a Jesús en la humildad, en el servicio silencioso, sin miedo de ir contracorriente y de pagar en propia persona”.
Francisco recordó que Jesús dijo a sus discípulos que serían “odiados por todo a causa de su nombre y que quien haya perseverado al final se salvará”.
Para el papa, estas palabras no turban la celebración de Navidad, pero le quitan esa “falsa cobertura dulzona que no le pertenece”.
A través de la red social Twitter, Francisco pidió poco antes del Ángelus, rezos “por todos los perseguidos por su fe cristiana”.
El su mensaje de Navidad de ayer, el papa Bergoglio recordó la brutal persecución de los cristianos en Irak y Siria. EFE