La transición de Ramírez, de zar petrolero a embajador en la ONU

La transición de Ramírez, de zar petrolero a embajador en la ONU

Foto Reuters
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Desde que inició el gobierno de Nicolás Maduro, al zar petrolero Rafael Ramírez, lo han hecho descender dentro de las políticas que maneja el chavismo.

El ingeniero mecánico de 51 años, quien reformó por más de 12 años la poderosa industria petrolera de Venezuela para ponerla al servicio del chavismo, ocupó los cargos de ministro de Petróleo y presidente de PDVSA (2002 y 2004) ; también fue designado como vicepresidente para el Área Económica, encargado entre otras cosas de la actividad del control de cambios vigente desde 2003, pero el 2 de septiembre de este 2014, Maduro decidió relevarlo y nombrarlo como Canciller de la República.

Con solo 3 meses y 24 días como Canciller, el mandatario nacional vuelve remover a Ramírez y este viernes 26 del presente mes, es nombrado como Embajador de Venezuela ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU).





La lealtad de Rafael Ramírez a Hugo Chávez lo convirtió en uno de sus funcionarios más cercanos, sin embargo para Nicolás Maduro, no parece estar satisfecho o conforme con su desempeño.

Conocido por su capacidad de ejecución en medio de la ineficiencia y burocracia ministerial, condujo a Pdvsa a través de un proceso de expropiaciones a empresas como Exxon, ConocoPhillips, Shell, Eni, Chevron o CNPC, al tiempo que promovió la politización de la petrolera en favor de la figura de Chávez.

Nacido en el estado Trujillo (oeste), Rafael Ramírez, conocido como “el flaco”, es ingeniero mecánico de la Universidad de Los Andes (ULA) en Mérida (oeste) y cursó estudios de maestría en Energética en la Universidad Central de Venezuela.

En su época universitaria vivió su primera experiencia en una filial de investigación de Pdvsa. Pero también, al provenir de una familia de izquierda comunista, se acercó a Adán Chávez, hermano del expresidente Chávez, lo que más adelante le sirvió para acercarse a las esferas del poder.

También conoció a Alí Rodríguez, exguerrillero venezolano, ex secretario general de la OPEP y uno de los hombres de confianza de Chávez en el área energética, y que lo llevó al Gobierno nacional.