Feliz Año, Feliz Año, era el saludo colectivo entre los representantes del sector deportivo que en los primeros días del 2015, se dieron cita en la sede del Instituto Nacional de Deporte. Miembros de las selecciones nacionales, que iniciaban su ciclo de preparación, se confundían en un solo abrazo, con sus entrenadores y dirigentes. A esta celebración de un nuevo año, también se incorporaron los obreros y empleados del organismo deportivo.
Intercambios de saludos y de cortas conversaciones sobre “Como la pasaron” y “Que les trajo el Niño Jesús” era la expresión colectiva. No podía escapar, en ese ambiente, el tema relacionado con las expectativas del sector deportivo para el año que comienza. El mayor evento para este ciclo serán los Juegos Panamericanos en Toronto, señaló uno de los presentes y hacia allí deberán concentrarse nuestros esfuerzos.
Eso, es verdad, pero debemos tomar en cuenta, la necesidad de superar las dificultades que tuvimos el año pasado, en donde terminamos por detrás de Colombia, expresó uno de los atletas. Si, se repiten los resultados Centroamericanos, no se requiere ser un científico de las estadísticas para pronosticar que en los Panamericanos podemos quedar en el octavo lugar, superados por EEUU, Cuba, México, Brasil, Canadá, Argentina y Colombia.
En la medida que la conversación sobre el tema en cuestión, se iba desarrollando, se sumaba mayor cantidad de participantes para dejar oír su opinión y la gran mayoría de ellos coincidían en la necesidad de superar las dificultades presupuestarias, organizativas y logísticas que habían confrontado, para poder elevar nuestro nivel competitivo y ocupar posiciones mas relevantes en el cuadro de medallas.
Creo, que debemos hacer sentir nuestra voz de protesta y reclamo frente a las autoridades gubernamentales para que sean implementados los correctivos necesarios en los planes operativos del sector deportivo federado, señaló colectivamente un grupo de atletas y entrenadores.
– ¿Qué proponen ustedes? fue la pregunta general.
En primer lugar, debemos aprovechar que en los próximos días, se va a celebrar la tradicional Misa del Deporte. Concurramos masivamente a ese acto litúrgico y en el momento de la Oración de los Fieles, elevemos nuestras peticiones por un deporte mejor.
– Excelente idea, dijeron todos. Corresponde ahora, a cada sector preparar sus peticiones. Acto seguido, hubo una efervescencia en el salón, los grupos discutían entre si, cual o cuales, serían sus peticiones. Una hora después, dieron lectura sectorial a las peticiones que iban a llevar a la Misa del Deporte en la Iglesia de La Divina Pastora en Caracas, el próximo 6 de Enero;
ATLETAS: acabar con la discriminación política ideológica que rige en los programas de asistencia social y el retardo en el pago de las Becas…roguemos al señor.
DIRIGENTES: eliminar de una vez por todas, el cerco presupuestario contra las Federaciones Deportivas. …roguemos al señor.
ENTRENADORES: respeto al derecho de sindicalización de los trabajadores y a la normativa laboral mediante la discusión y aprobación de los contratos colectivos…roguemos al señor.
EMPLEADOS: acabar con el nepotismo que impera en el IND y un aumento de sueldo que permita enfrentar el alto costo de la vida. …roguemos al señor.
OBREROS: un aumento salarial indexado a la inflación a todos los trabajadores. …roguemos al señor.
JUBILADOS: respeto a nuestros derechos laborales con la implementación inmediata de la Homologación de sueldos y salarios y el pago inmediato de los Pasivos Laborales….te lo pedimos Señor.
Representantes del Sector Deportivo Universitario: acabar con la militarización de los JUVINES…roguemos al señor.
Empleados de la Contraloría pidió celeridad en los juicios y castigo para las personas señaladas en los casos de corrupción….te lo pedimos Señor.
Empleados de la Dirección de Administración y Presupuesto: acabar con el manejo discrecional por parte del Ministro, del Fondo Nacional del Deporte…roguemos al Señor.
Además, para evitar manipulaciones y falsas acusaciones contra nuestras acciones, vamos a desplegar ese día una gran pancarta con el siguiente pensamiento:
“No puede llamarse cristiano quien teme a la crítica de sus semejantes”
Todos los presentes, se tomaron de la mano como señal de hermandad deportiva y de su compromiso de luchar por “Un deporte Mejor en Una Sociedad Mejor”