Río de Janeiro, la segunda mayor ciudad de Brasil, lanzó hoy un plan para desarrollar proyectos preventivos con los que pretende minimizar el impacto de los desastres naturales causados por el cambio climático.
El programa, llamado “Río Resiliente”, se enmarca en los objetivos de la red internacional 100 Ciudades Resilientes, impulsada por la Fundación Rockefeller, que dará apoyo técnico a las iniciativas de la ciudad brasileña.
Las acciones futuras del plan se apoyarán en un documento presentado hoy, que identificó los principales riesgos climáticos para Río de Janeiro, entre los que destacan las lluvias, que periódicamente causan deslizamientos de tierras, olas de calor, la elevación del nivel del mar y epidemias de dengue.
La Alcaldía de Río de Janeiro informó que desde 2009 ha invertido 4.300 millones de reales (unos 1.650 millones de dólares) en acciones de prevención de desastres.
Ese presupuesto incluye, entre otros proyectos, la construcción de depósitos de agua subterráneos para evitar las recurrentes inundaciones en el centro de la ciudad y de una red de carriles exclusivos para autobuses urbanos, proyecto que está siendo desarrollado con motivo de los Juegos Olímpicos de 2016.
El concepto de “resiliencia” se usa en urbanismo para referirse a la capacidad de una ciudad de volver a la normalidad después de estar sometida a condiciones extremas, según explicó la Alcaldía carioca. EFE