El presidente de Francia, François Hollande, instó hoy a la movilización internacional para resolver los conflictos armados que perduran y se han convertido en caldo de cultivo del terrorismo que amenaza al mundo. EFE/Isabel Saco
“Cada vez que se deja perdurar un conflicto, el terrorismo se apropia de la situación”, dijo Hollande durante su intervención en el Foro Económico Mundial de la ciudad suiza de Davos, esperada con gran expectación tras los atentados yihadistas de París de hace dos semanas.
La respuesta a esa grave situación ha de ser “internacional, global, compartida entre los Estados y por las grandes empresas, que también deben intervenir”, sostuvo Hollande ante un auditorio compuesto por cientos de representantes y directivos de compañías, algunas de ellas las más importantes del mundo en su sector.
En su opinión, el terrorismo que atacó Francia -como el que se presenta bajo la denominación de Al Qaeda o Estado Islámico (EI) en Oriente Medio o Boko Haram en Nigeria- se ha nutrido de los conflictos que se han dejado sin solución en los últimos años.
Mencionó, en concreto, los de Irak y Siria (con importantes territorios controlados por el Estado Islámico en ambos países), Yemen y África, particularmente en Nigeria, cuya situación está repercutiendo en Camerún y Chad.
El presidente francés cifró en 40.000 los terroristas que el yihadista EI es capaz de movilizar y afirmó que, de ellos, 10.000 son extranjeros, gran parte reclutados fuera de Oriente Medio.
Tras los ataques terroristas de París con 17 víctimas mortales, el Estado Islámico declaró “héroes” a sus autores, quienes también fallecieron.
Hollande señaló que es responsabilidad de los Estados encontrar soluciones a esos conflictos, que no hacen más que multiplicarse, y consideró urgente asegurar una transición política en Siria para detener la guerra.
En la lucha antiterrorista, aseguró que Francia seguirá presente “más que nunca en África para ayudar a los países que sufren el terrorismo”.
“Francia no puede hacer todo, no puede actuar sola, pero cada vez que pueda lo hará para mostrar el ejemplo”, subrayó.
En este llamamiento a la acción, Hollande alertó a los presentes de que “todos los países del mundo son susceptibles de ser atacados por el terrorismo, muchos ya lo han sido, otros lo temen, pero todos deben prepararse”.
Recalcó que el terrorismo se nutre de múltiples fuentes y usa todos los recursos a su alcance para propagar sus puntos de vista y multiplicar sus acciones violentas.
Por eso, pidió a las compañías que se comprometan con hechos en la lucha contra el terrorismo, principalmente a las organizaciones financieras y a las empresas que ofrecen servicios de internet.
A estas últimas, les pidió identificar los contenidos ilegales y hacerlos inaccesibles a los usuarios, como parte de una regulación general para evitar que el terrorismo continúe sacando provecho de las tecnologías para cumplir sus objetivos.
“A nivel europeo y nacional, debemos impedir la utilización de internet para fines de odio y violencia”, opinó.
A los bancos les instó a cortar “las fuentes de alimentación” del terrorismo, luchando para ello contra el lavado de dinero, un recurso básico de financiación del terrorismo internacional, como lo son también los tráficos de drogas y de personas.
A los empresarios presentes en la sala, pero sobre todo “a los jefes de las grandes compañías, les pido no sólo vigilancia, sino compromiso”, insistió.
“No hay que nutrir a la bestia que también les golpeara en algún momento”, advirtió.