El agua que llega a los hogares de Caracas, los Valles del Tuy, parte de San Juan de los Morros y el Sur de Aragua proviene de Camatagua, un embalse que en la actualidad no posee las condiciones óptimas para proveer un servicio de calidad, porque tiene una elevada concentración de material orgánico. Así lo reveló un estudio realizado por el laboratorio de limnología de la Universidad Central de Venezuela (UCV), financiado por el Fondo Nacional para la Ciencia y Tecnología (Fonacit). Así lo reseña elperiodiquito.coma / Kaliana Andueza
Según fuentes oficiales, las muestras tomadas durante el año 2012-2013, indican que la represa tiene una alta densidad de fitoplancton, alta concentración de fósforo, nitrógeno y clorofila, elementos que son calificados por los expertos como un estado eutrófico, por lo que sus aguas deben recibir un tratamiento específico antes de ser incorporadas a la red de distribución.
Expertos revelaron que el líquido que se almacena en ese embalse debe ser procesado en la planta potabilizadora Caujarito, en el estado Miranda, que no fue diseñada para tratar aguas con tal grado de contaminación orgánica, por lo que no hay garantías de que lo que se distribuye por las tuberías sea 100% apto para el consumo humano.
Un grupo de pescadores de la zona, señaló que desde hace cuatro años el embalse “Ernesto León David” recibe aguas de la cuenca del lago de Valencia con altos contaminantes, vertidos residuales, restos de fertilizantes y pesticidas usados en actividades agrícolas y agropecuarias a través del Sistema de Trasvase Taiguaiguay Tucutunemo, que está conectado con el río Guárico, que es el principal afluente de la presa aragüeña.
Por esa razón, expresaron que cada una de las hidrológicas ubicadas en el Sur, encargadas de la distribución del vital líquido deben tomar las previsiones necesarias y aplicar los trabajos correspondientes que permitan aminorar el olor putrefacto que presenta y el color turbio del agua que afecta a las comunidades del Sur.
SOLICITARON INVERSIÓN
La mayoría de las personas que hacen uso del embalse, pescadores, turistas propios y visitantes coincidieron que el Estado venezolano debe invertir recursos que permitan el buen funcionamiento de la represa, igualmente debe tomarse en consideración que con el paso de los años los equipos técnicos han cumplido con su tiempo de uso, por ende se debe sustituir todos esos equipos y tuberías deterioradas, para el tratamiento óptimo del agua.
BAJAN NIVELES DE AGUA
Extraoficialmente se pudo conocer, que producto de la sequía registrada en 2014 y principios de 2015, el embalse de Camatagua ha sufrido una disminución considerable en cuanto a sus niveles de agua. Asimismo, se pudo conocer que con poca fuerza el vital líquido llega a las plantas de tratamiento lo que podría afectar el suministro de energía y distribución del agua hacia las ciudades ya mencionadas.
PECES MUERTOS
Pescaderos expresaron que la muerte de los peces a la orilla de la represa se debe a un fenómeno natural que ocurre una vez al año, cuando los niveles del agua bajan y la falta de oxígeno genera la muerte. Mientras que otros aseguraron que la muerte de los peces se debe al alto índice de contaminantes y vertidos residuales que caen a la represa. Otra versión indica que posiblemente hay un pez nuevo en el reservorio que ocasiona la muerte a otros peces, específicamente al pavón.