La Mesa de la Unidad Democrática fijó posición ante los venezolanos y la comunidad internacional Ante las amenazas de Nicolás Maduro difundidas en cadena nacional de radio y televisión durante el fin de semana.
A través de un comunicado, la MUD alertó al país y a la comunidad internacional sobre las “pretensiones del gobierno de Venezuela de provocar un ambiente de caos que apunte a la ilegalización de la oposición democrática como una manera de prevenir la aplastante derrota electoral que le propinará el pueblo venezolano en las venideras elecciones legislativas”, se lee.
Declaración de la Mesa de la Unidad Democrática
Bien sabido es que Venezuela vive una crisis sin precedentes como consecuencia de la aplicación de un modelo económico fracasado que ha destruido el aparato productivo, que ha generado la mayor inflación del mundo, inestabilidad cambiaria, una creciente escasez, desabastecimiento, corrupción y una creciente violencia delictiva, junto a la imposición de un modelo político-económico hegemónico, excluyente, cada vez mas contrario a nuestra Constitución.
Ante las amenazas de Nicolás Maduro difundidas en cadena nacional de radio y televisión durante el fin de semana, la Mesa de la Unidad Democrática desea fijar posición ante los venezolanos y la comunidad internacional.
El descontento popular es inocultable y el empobrecimiento de importantes sectores de la población resulta insostenible. Las medidas económicas anunciadas hace pocos días por voceros oficiales se tradujeron en una nueva mega devaluación de nuestra moneda. Esa es la realidad de la Venezuela de hoy.
Frente a ese alarmante escenario, y en vez de afrontar los problemas que el mismo gobierno ha creado, Nicolás Maduro emplea la estrategia del escapismo y la amenaza.
Maneja, sin prueba alguna, el argumento de supuestas conspiraciones extranjeras y pretendidos planes desestabilizadores para desviar la atención sobre el verdadero foco de la crisis. Amenaza a empresarios y medios de comunicación de aquí y afuera en un intento por ocultar su desprestigio y debilidad. Amenaza a gobiernos extranjeros y organismos internacionales que han advertido sobre los riesgos de la crisis política venezolana. Y amenaza a quienes mantenemos que el cambio debe ser pacífico, democrático, constitucional y electoral.
Ante esa delicada situación, alertamos al país y a la comunidad internacional sobre las pretensiones del gobierno de Venezuela de provocar un ambiente de caos que apunte a la ilegalización de la oposición democrática como una manera de prevenir la aplastante derrota electoral que le propinará el pueblo venezolano en las venideras elecciones legislativas.