Las lluvias de los últimos días, época en la que se celebra el carnaval brasileño, elevaron hoy al 8,3 % el nivel del sistema Cantareira, el mayor embalse de Sao Paulo, gran afectado por la sequía del sureste brasileño y que volvió a su estado de comienzos de diciembre, reportaron hoy las autoridades.
La compañía de saneamiento básico del estado de Sao Paulo Sabesp indicó que el lunes el promedio de lluvias habitual para todo el mes de febrero, de 199,1 milímetros, fue superado y el reporte más reciente, de hoy, apunta ya un índice de precipitaciones de 228,4 milímetros.
El sudeste de Brasil, principalmente el estado de Sao Paulo, enfrenta su peor crisis hídrica desde 1930, lo que ha llevado a las autoridades a tomar medidas como la transposición de ríos, multas por el aumento de consumo, bonificaciones por el ahorro del mismo y un racionamiento mediante reducción de la presión del acueducto.
La situación también tiene en alerta a las autoridades y a la población ante la posible necesidad de implementar un racionamiento eléctrico, debido a que el país depende en su mayoría de una matriz energética por hidroeléctricas.
El sistema Cantareira abastece 6,5 millones de habitantes (un tercio de la población) en la región metropolitana de Sao Paulo y desde noviembre comenzó a operar con la segunda cota del llamado “volumen muerto”, una reserva técnica del conjunto de represas.
Las lluvias veraniegas, a pesar de su fuerza, que causó innumerables inundaciones, caída de casi 1.000 árboles y varios muertos por rayos en Sao Paulo durante lo que va del año, no habían sido suficientes para elevar el nivel de los embalses.
A pesar del aumento en los últimos días del nivel del sistema Cantareira, que llegó a estar en el 5,1 %, las autoridades y especialistas basados en las previsiones meteorológicas prevén que su capacidad llegará al mínimo en septiembre. EFE