El dueño de una red de 35 pequeños supermercados en Venezuela, intervenida este mes por el Gobierno bajo la acusación de acaparar alimentos, está dispuesto a invertir en nuevas tiendas si lo dejan seguir operando su negocio, reseña Reuters.
“No queremos vender, ni ser expropiados”, dijo en una entrevista con Reuters desde Boston, José Vicente Aguerrevere, un ingeniero mecánico que se convirtió en empresario.
Aguerrevere inauguró hace 9 años la red de abastos Día Día cerca de los barrios más pobres y dijo que pensaba abrir este año 10 tiendas más con una inversión de 3,5 millones de dólares.
“Si seguimos operando la red claro que lo vamos a invertir”, dijo Aguerrevere, asegurando que ha sido rentable atender con pocos intermediarios y una distribución eficiente a consumidores que no tienen tiempo ni dinero para ir a grandes supermercados.
“Nacimos en la época que vive Venezuela hoy en día, no somos previos a (Hugo) Chávez. Entendimos los riesgos que teníamos, pero al ser una compañía apegada a la ley, en ningún momento pensamos que íbamos a ser parte de esto”, agregó.
Bajo el mandato de Chávez, se nacionalizaron bancos, firmas de telecomunicaciones y de energía eléctrica, entre otras compañías, para ampliar el control del Estado en la economía.
Ahora Venezuela atraviesa una recesión económica, sufre de una elevada inflación y de escasez de productos básicos, en medio de una caída de los precios del crudo que exporta el país y ha hecho mermar la cantidad de dólares disponibles para importar los artículos que consumen los venezolanos.
A principios de febrero, el presidente Nicolás Maduro, heredero político del fallecido Chávez, ordenó una serie de inspecciones a supermercados y farmacias para enfrentar lo que califica como una “guerra económica” a la que culpa de la escasez que vive el país.
En esa campaña, el Gobierno culpó a Día Día de acaparar mercancía, intervino temporalmente la semana pasada a la empresa y detuvo a su director ejecutivo Manuel Morales y a Tadeo Arriechi, un abogado externo de la compañía.
“La mejor defensa de las dos personas que están presas es hacer bien nuestro trabajo durante esta intervención”, comentó.
Auditado desde hacer 5 años
La cadena y su centro de distribución han operado desde hace tiempo bajo el estricto escrutinio del Gobierno. “Lo auditan una y dos veces a la semana durante los últimos cinco años”, comentó Aguerrevere en una entrevista telefónica.
El empresario asegura tener documentos que demuestran cómo el Gobierno avaló hasta este mes los inventarios de la compañía, que para el día de la intervención alcanzaban para surtir a su treintena de locales con productos básicos por tres días.
Maduro, sin embargo, aseguró a principios de febrero que la cadena “le hace la guerra al pueblo”.
“No queremos entregar, queremos seguir haciendo lo que sabemos hacer, que es llevar los productos a los sectores populares”, dijo el empresario.