Científicos británicos han calculado la masa corporal del estegosaurio “Sophie”, un dinosaurio herbívoro que se estima vivió hace 150 millones de años y pesaba en torno a 1,6 toneladas, informó este miércoles el Museo de Historia Natural de Londres.
Con el 85 por ciento de su esqueleto intacto -más que cualquier otro de estegosarurio en el mundo-, este fósil, de 5,6 metros de alto y 2,9 metros de largo, está compuesto por 360 huesos y está expuesto en la Sala de la Tierra del museo de la capital británica.
Los expertos sostienen que en el momento de su muerte, “Sophie” podría haber tenido seis o siete años de edad, cuando su peso de 1.600 kilogramos se asemejaba al de un rinoceronte pequeño, aunque su tamaño hubiese sido considerablemente mayor si hubiese continuando creciendo.
“Si queremos estimar la velocidad a la que corre un animal, hay que saber la masa corporal. Si queremos saber algo sobre su metabolismo, hay que saber su masa corporal”, declaró a la cadena BBC Charlotte Brassey, paleontóloga del Museo de Historia Natural (NHM, sus siglas en inglés).
El esqueleto de “Sophie” fue encontrado por el paleontólogo estadounidense Bob Simon en 2003 en un rancho en el estado de Wyoming (Estados Unidos) y diez años después fue adquirido por el NHM.
No obstante, antes de ser expuesto por primera vez el pasado diciembre, los científicos pasaron por el escáner los 360 huesos que componen este esqueleto para digitalizarlos y crear así “modelos tridimensionales” con los que llegar a determinar después su volumen.
Tradicionalmente, los expertos han calculado la masa corporal de animales a partir de la distancia establecida desde la circunferencia del fémur hasta el húmero, una técnica especialmente válida para ejemplares de especies extintas de los que se tienen pocos restos.
“Sin embargo, Sophie es excepcional porque está casi completa. He pasado el último año digitalizando todo su esqueleto, creando modelos tridimensionales. Estos los importamos a un programa CAD (diseño asistido por computadora) y luego envolvemos formas muy simples alrededor de su contorno corporal, cuyo volumen nos ayuda a predecir su masa corporal”, explicó Brassey.
Los resultados arrojados por ambos métodos (el moderno y el tradicional) han concordado, destacó la paleontóloga.
El equipo de expertos del NHM continúa aún inmerso en una amplia investigación sobre “Sophie” y prevé que en los próximos años será capaz de dar más respuestas respecto a los estegosaurios.
“Estamos encantados de haber podido empezar todo esto pronto. Ahora estamos comenzando a unir músculos a nuestros modelos computerizados para que (Sophie) eche a andar y nos diga algo sobre su psicomotricidad”. EFE