La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, fue blanco de abucheos e insultos a su llegada hoy al centro de convenciones donde inauguró el Salón Internacional de la Construcción Civil, en Sao Paulo. EFE
La mandataria recibió abucheos por parte de un grupo de personas que trabajan en la feria dentro del Centro de Convenciones de Anhembí, según presenció Efe en el lugar.
La jefa del Estado estaba acompañada en ese momento por el ministro de las Ciudades y exalcalde de Sao Paulo, Gilberto Kassab, entre otros funcionarios.
Sao Paulo es una de las ciudades brasileñas donde el domingo pasado se registraron cacerolazos y bocinazos contra Rousseff, mientras la mandataria ofrecía un discurso en cadena nacional.
Además del cacerolazo que se escuchó en barrios acomodados de algunas ciudades, varias protestas contra el Gobierno están previstas para el próximo domingo.
Las protestas ha sido convocadas por diferentes grupos, defienden reivindicaciones variadas, cuentan con el respaldo de partidos de oposición y en su mayoría demandan un juicio político contra Rousseff por su supuesta responsabilidad en las corruptelas de la petrolera estatal Petrobras y la delicada situación económica del país.