Decenas de trabajadores de 24 empresas de la industria del plástico se reunieron con las autoridades del Consejo Nacional Electoral para exigirles que se les entregue las acreditaciones a los líderes gremiales de SINUTRAPLASQUIMPEC, que fueron electos en mayo del año pasado y que luego de 10 meses aún no cuentan con las certificaciones que los acreditan como dirigentes de este sector.
Como resultado de este encuentro, Julio Polanco, coordinador de la Unión Nacional de Trabajadores (Unete), informó que el CNE prometió que este tema será abordado en una próxima reunión al final de la semana que viene. “Nos alegaron que el CNE celebra por años más de mil procesos que pueden generar algunos retrasos, y más aún este 2015 cuando se está en víspera del sufragio parlamentario”, explicó Polanco quien emplazó a la presidenta del CNE, Tibisay Lucena, dé celeridad a la solicitud de la clase obrera, “pues es responsabilidad del órgano electoral certificar el proceso independientemente de la cercanía de las elecciones de la Asamblea Nacional. No se justifica tanto retraso”.
Además, ÚNETE resaltó su preocupación por la situación que se presentó con el presidente de Unasur, Ernesto Samper, quien informó sobre la fecha de elecciones parlamentarias en Venezuela, lo que, a juicio de los trabajadores, constituye una absoluta injerencia que le resta credibilidad al árbitro.
Por su parte Orlando Chirinos, dirigente nacional de la industria del cemento, señaló que los retrasos del CNE forman parte de la escalada de una política de Estado que pretende en retrasar las certificaciones de los sindicatos, para reducirlos a su mínimo expresión. “Pareciera que el Estado se aprovecha para demorar los convenios de contratación colectiva. Por eso es que nos encontramos instituciones que siguen subordinadas a los intereses políticos partidistas. Mientras que el CNE no nos certifique tampoco se pueden denunciar formalmente las prácticas antisindicales. Por lo pronto, el CNE nos confirmó que en 15 días se estaría certificando el Sindicato de Trabajadores del Cemento del estado Lara (Sintracel)”, informó Chirinos.
Más acciones
Simultáneamente a esta reunión, otro frente de trabajadores se dirigió hasta el Ministerio del Trabajo en Caracas para protestar por la situación de más de mil trabajadores de empresas públicas y privadas, cuyos puestos de empleos están amenazados por procedimientos de calificaciones de despido, según lo informó Julio Polanco, quien además dijo que otra comisión se dirigió también al Ministerio de Salud para exigir la nivelación de sus sueldos con respecto al salario básico.
Sobre la protesta en el Ministerio del Trabajo, el portavoz de ÚNETE, añadió que “nos acercamos para rechazar la burocracia de la Inspectoría de Trabajo de Carabobo ante las denuncias consignadas por despidos masivos, con pliegos de peticiones de reducción de personal”.
Precisó que de Chrysler de Venezuela han sido despedidas 76 personas; 120 de BigCola, 270 de Ford Motos, así como 506 de General Motors y existen otras 250 calificaciones de despidos pendientes de Coca Cola y 30 trabajadores de Cereales Polar. “Estuvimos presentes en el ministerio, y nos enviaron a un funcionario que sólo recogió la problemática, pero no nos atendió”, acotó el portavoz de la Unión Nacional de Trabajadores.
La cruzada de denuncia también los llevó al Ministerio de Salud para denunciar que los trabajadores de Barrio Adentro “quedaron por debajo de la tabulación del salario mínimo y con la protesta del día de hoy se estableció en una minuta que sí le van a dar respuesta efectiva con un aumento de salario y desde el punto de vista reivindicativo con ticket de alimentación”, dijo Polanco que le envió un mensaje al presidente Nicolás Maduro.
Para finalizar Polanco expresó su solidaridad con el presidente Nicolás Maduro por las sanciones de Estados Unidos, que considera a Venezuela una amenaza para su seguridad, pero advirtió que no por esto puede desatender los problemas de la clase obrera.
Nota de prensa