Darío Graffe, vecino de Guasipati y dirigente estudiantil en la UDO-Bolívar, denuncia la situación que afecta a varios sectores de la capital del municipio Roscio que recibe un mal servicio de luz por la falta de mantenimiento e inversión en el sistema eléctrico. El Fortín de Guayana
“Muchas veces a los habitantes de Guasipati estamos más de 7 horas sin el servicio, impidiendo labores cotidianas de nuestras familias y del sector comercial, debido a la falta de inversión a la línea 34,5 KV de la Sub-Estación Villa Lola que abastece al municipio Roscio, Palo Blancal, El Cintillo, Santa Rosa, El Miamo y El Palmar”, dijo.
En estos últimos 15 días en los sectores populares y en la capital de Roscio, se han presentado déficit en el servicio de luz, a su juicio por la incompetencia de las autoridades locales y regionales, agrega.
Nuestras barridas y sectores populares se encuentran a oscuras e implorando que estas autoridades se apiaden de invertir en el alumbrado público para el municipio, reitera el dirigente estudiantil.
Carecemos –aseguró- de información oportuna ante los frecuentes apagones en la localidad, como tampoco ha habido algún pronunciamiento por parte de Corpoelec.
El agua también
Habitante del Sector Santa Rita, Guasipati
Pero la falta de un servicio eléctrico confiable no es el único problema, como dirían en los pueblos, éramos pocos y parió la abuela, pues Graffe afirmó, que de igual manera ocurre con el agua para el consumo de los pobladores de Roscio.
“En mi visita a varios sectores de la población pude conversar con muchas personas y pongo de referencia a tres amas de casa que coincidieron casi en lo mismo”, citando el caso de la señora Odalys Parra, habitante del sector El Paraíso, quien aseguró que desde que se mudó a ese sector no conoce lo que es agua.
Menciona también el testimonio de la señora, María Bonalde, habitante de la barriada Primero de mayo, quien es una joven madre, “que me supo explicar que hay días que no cuenta con el servicio del agua para el aseo de su casa, ni para los teteros de los muchachos”.
Y por último la señora Angélica Coa, una doña mayor que habita con su hijo y su nuera en el sector Antonio José de Sucre “Aeropuerto”, “me narraba que en esa zona hace poco le echaron el asfalto, pero no colocaron las tuberías de aguas blanca para las diferentes casas, lo que a su vez trae como consecuencia el impedimento en hacer los quehaceres de su hogar”.
-Son testimonios –puntualizó Darío Graffe- que reflejan las penurias que lastimosamente viven muchas familias de Roscio.
En mi caso, vivo en el Sector San Luis, cercano al CDI, somos muchas familias que clamamos por el servicio de agua y falta de alumbrado público en nuestras calles.
“Exhortamos al ciudadano alcalde a dejar la demagogia y a decirle la verdad al pueblo, porque ya la gente no le cree, lo invito a salir y que se aboque a resolver los problemas de nuestros sectores que el muy bien sabe de estas carencias que tenemos los roscianos”, dijo Graffe.