Los maleantes no tuvieron piedad y sin titubeos entraron a la hacienda Santa Ana, ubicada cerca del sector pesquero Barranquitas, del municipio Rosario de Perijá, y acabaron con una familia, presuntamente para robarlos. A madre, padre e hijo de un año los mataron a batazos, según fuentes policiales. A las víctimas, además, las degollaron. Así lo reseña laverdad.com / Gastón Fernández – Luisana González
A los tres los amordazaron y les amarraron las manos hacia atrás con mecatillo. Sus cuerpos sin vida los arrastraron desde el interior de la vivienda y los acomodaron en el patio uno al lado del otro, boca abajo. El niño, de un año, estaba en pañales. El triple homicidio al parecer lo ejecutaron ayer en horas de la madrugada y no fue hasta las 3.30 de la tarde que un obrero, de nombre Rodolfo, encontrara los cadáveres.
El trabajador impactado al ver tal escena, dejó de arrear el ganado y comenzó a gritar pidiendo auxilio. Cuando el resto de los trabajadores llegaron a ver lo que había pasado, desde un teléfono celular llamaron a las autoridades y notificaron sobre el “horrible” crimen.
La noticia del asesinato de la familia de la etnia Wayúu corrió rápido. En segundos todos los pobladores de la parroquia Donaldo García se acercaron a la hacienda a averiguar.
Comisiones de la Guardia Nacional y la Policía municipal de Rosario de Perijá se trasladaron hasta la finca, retiraron a todos los averiguadores del lugar de los hechos y resguardaron los cuerpos. Los detectives del Eje de Homicidios de la Policía científica, Subdelegación Machiques, llegaron media hora después del hallazgo y de inmediato iniciaron las experticias.
Los cadáveres los taparon con sabanas para no alimentar el morbo de la gente que observaba el procedimiento. Durante el recorrido por la escena del crimen los funcionarios del cuerpo detectivesco notaron que en el lugar faltaba una bombona de gas, varios kilos de queso que se fabricaban dentro de la hacienda y una carretilla.
La ausencia de estos elementos dentro del lugar les hace pensar a los investigadores que se podría tratar de un robo. Sin embargo, los homicidas se ensañaron tanto con cada uno de los miembros de la familia que no descartan la posibilidad de que se trate de una venganza.
Investigaciones
Los detectives tardaron casi cinco horas en colectar evidencias, levantar los cadáveres y buscar testimonios. Durante los allanamientos que hicieron en la zona, al parecer lograron detener a un hombre en calidad de sospechoso que tenía bajo su techo varios de los objetos que le robaron a los occisos
Fuentes policiales aseguraron que a este caso se le daría prioridad por lo “dantesco”. “Esperamos resolverlo lo más pronto posible. Ya formamos una comisión especial que solo se aboque a investigar y a buscar a los responsables de este triple homicidio”.
Los residentes del sector informaron a las autoridades que el grupo familiar ultimado era oriundo de San José de Perijá y se les veía con frecuencia a bordo de una motocicleta haciendo diligencias en el poblado.
“Estoy impresionado ante tal ensañamiento en contra de esa familia tan humilde. Sea robo o una venganza pagó un inocente. Las investigaciones ya se iniciaron y vamos a dar con los homicidas”. Gilberto Hidalgo, director de Polirosario.