Autoridades de la Unión Europea ya estudiaban los procedimientos de seguridad de las aerolíneas alemanas mucho antes del incidente del 24 de marzo de Germanwings después que una inspección de rutina de su agencia de seguridad de aviación cuestionó algunos procedimientos, dijo el miércoles un funcionario a AP.
El funcionario de la Comisión Europea, que pidió no ser identificado debido a la sensibilidad del caso, dijo que los temas en cuestión incluyeron la salud de los pilotos, pero no dio más detalles.
El funcionario dijo que en noviembre del año pasado autoridades europeas “habían solicitado una aclaración para asegurar que todas las aerolíneas cumplieran debidamente las normas”.
Andreas Lubitz, copiloto de Germanwings, había sufrido de depresión antes de encerrarse en la cabina de mando y estrellar deliberadamente el Airbus A320 contra una montaña en Francia durante un vuelo de Barcelona a Dusseldorf. Las 150 personas que iban en el aparato perecieron.
El funcionario europeo dejo que los cuestionamientos ocurrieron tras una inspección de rutina de la Agencia Europea de Seguridad en la Aviación (EASA) sobre los procedimientos de las aerolíneas de todos los estados miembros y afirmó que ahora evalúa las sugerencias alemanas para remediar la situación.
Pero el incidente de Germanwings ha complicado las cosas. Si no se toman medida satisfactorias, la UE pudiera tomar medidas jurídicas contra la nación miembro, pero es demasiado temprano para hacerlo ahora, dijo el funcionario.
La aerolínea alemana Lufthansa indicó el lunes que no tiene obligación legal de reportar a la autoridad germana de aviación el hecho de que Lubitz había sufrido de depresión antes de cumplir los requisitos para ser piloto hace varios años.
Los investigadores creen que Lubitz, de 27 años, informó a su escuela de pilotos cuando regresó de un receso de siete meses en su capacitación en 2009 que había tenido un período de “depresión severa”. Lufthansa ha dicho que el copiloto aprobó todos los exámenes médicos posteriormente.
La UE ha detallado las normas de seguridad aérea, que incluyen reglas sobre la salud mental de los pilotos, que los estados deben tomar en cuenta. EASA realiza análisis regulares para determinar si las 28 naciones de la UE respetan esas normas. “Esto es algo normal y periódico”, dijo el funcionario.