El litro costaba 65 bolívares y subió 18 bolívares. Extraoficialmente se ha conocido que precio del combustible en estas bombas es reajustado periódicamente por el Ministerio del Poder Popular de Petróleo y Minería, a partir de evaluaciones que se hacen al comportamiento del valor del combustible en la zona fronteriza, pues compite con el costo de la gasolina colombiana que venden en las estaciones de Norte de Santander y también con la gasolina venezolana subsidiada que llega de contrabando a Colombia.
Con el nuevo reajuste, el precio de la gasolina en las Safec se estaría equiparando al valor que mantiene el combustible venezolano de contrabando que venden “los pimpineros” de la frontera colombiana, pero continúa siendo un poco más barata que la gasolina nacional colombiana que se expende en las estaciones de Norte de Santander. En estas últimas, el galón de 3.7 litros vale 5380 pesos, cerca de 550 bolívares al cambio actual.
A medida que se ha incrementado el precio de la gasolina en las estaciones de Safec, ha sido menor la afluencia de vehículos a dichas gasolineras, donde solamente pueden abastecer combustible carros particulares de matrícula extranjera y también de placa venezolana que no tienen Tag, y que por lo general pertenecen a personas que viven en el departamento Norte de Santander. Los vehículos pueden surtir 40 litros cada vez que entran a la estación de servicio internacional.
Se dice que la baja cantidad de usuarios en estas estaciones en parte obedece al precio de la gasolina, pero también a la rigurosa aplicación del decreto de Día de Parada, el cual restringe la circulación de vehículos con o sin Tag por la avenida Venezuela de San Antonio. Este lunes en la mañana se observó bajo ingreso de carros a la estación de servicio internacional de San Antonio del Táchira.
Al ser consultados sobre el impacto del nuevo reajuste de la gasolina, algunos conductores manifestaron que es poca la diferencia entre el precio de la gasolina venezolana que venden las estaciones Safec y el de las estaciones colombianas o el que manejan los pimpineros, que revenden la gasolina subsidiada que llega de contrabando al vecino país. No obstante, insisten en que optan por la gasolina venezolana que se vende en las Safec porque es de mejor calidad y rinde más.
José G. Hernández