Como consecuencia del déficit de abastecimiento en el país, los venezolanos han optado por una técnica efectiva para obtener artículos a precios justos. Diana Larez/ NPG
Iniciativa propuesta por el fallecido presidente Hugo Chávez, y para el año 2008 era un método económico inviable, hoy en día es un plan de acción ante la escasez de productos esenciales en la alimentación del consumidor criollo.
En la actualidad el canje se ha convertido en un procedimiento mayormente utilizado por madres y padres de familia para obtener leche completa o pañales desechables y productos de higiene personal.
Laura Abreu dio a conocer que desde dos años atrás ha optado por el trueque como un método de surtir su alacena. “Cuando Chávez dijo que intercambiaríamos gallina por carne de res, o plátanos por cachamas parecía anécdotas que nunca implementarían los guayaneses, ahora es la dura realidad que nos envuelve”.
Los consumidores a diario aguardan en las afueras de centros de distribución alimentaria, para adivinar que saldrá del camión de reparto. “En las colas también nos sirve para intercambiar” agregó Abreu.
“Con mi hermana, amistades y familiares optamos canjear leche, harina precocida o harina de trigo; en los mercados los comerciantes venden a precios exorbitantes. Es una alternativa viable pero no deberíamos estar ante esta situación”, expresó Abreu.
Trueque online
Las modalidades de cambio no solo establece el trueque directo, a partir del avance de la escasez, redes sociales como Facebook o Instagram son una fuente inmediata para establecer intercambios de repuestos, cauchos de automóviles, alimentos y artefactos electrodomésticos.
Páginas como El Perolero Poz o San Félix son una de las más visitadas, debido al fácil acceso de los vendedores para subir imágenes, comentar e intercambiar datos. Cabe destacar que en las fanpage los consumidores establecen el precio y los productos a cambiar.
Los llamados “combos” son una oferta imperdible para los compradores, puesto que ofrecen una cantidad de tres a cinco artículos por el cambio de uno que igualen el costo general.
“Yo cambié un combo de dos afeitadoras, un desodorante en aerosol y un paquete de jabón por una leche en polvo. Las personas que trabajamos no podemos adquirir los productos en una cola, optamos por comprarlos o intercambiar en Facebook”, dijo Marlene González.
Salud en un trueque
La dificultad para adquirir artículos, no solo abarca el sector alimenticio sino también la salud, puesto que diversidad de pacientes, recurren al trueque como un alivio a sus dolencias.
Patricia Arrieta refirió que desde diciembre de 2014 se ha visto en la premura de solicitar Micardis Plus en redes sociales. “El mes pasado conseguí dos cajas de antihipertensivos en Instagram, los cambié por cuatro cajas de acetaminofén”.
Arrieta manifestó descontento ante las maniobras que deben efectuar los venezolanos para comprar medicinas, “vamos cada día en retroceso, como es posible que ahora deba inscribirme en una lista para adquirir un remedio, la inversión y liquidez de dólares afecta cada día al pueblo, no a los gobernantes”.