Ismael García: ¡No te creo Nicolás!

Ismael García: ¡No te creo Nicolás!

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Los venezolanos nos preguntamos con qué cuento vendrá Nicolás Maduro esta semana, porque han sido muchos los intentos fallidos para distraer la atención de la peor crisis política, económica y social, jamás vivida en nuestro país. Ni las denuncias de supuestos magnicidios, de Golpes de estado, de invasiones extranjeras, de injerencias de otros países, han podido tapar la verdad de lo que aquí acontece, y es que una parranda de ineptos y corruptos, acabaron con todos los dineros del Estado, y como ya no tienen recursos ni labia para seguir endeudándose, aprietan las tuercas al pueblo, como que si con máquinas capta huellas, con administrar el hambre y las necesidades de la gente por un terminal de cédula o con cualquier otro control, van a lograr solucionar los serios problemas de escasez, de desabastecimiento y de inflación que día a día nos asfixian más.

Hemos llegado a un momento crucial y alarmante, porque producto de todos los desaciertos cometidos en materia económica, hoy pagamos las consecuencias de estas improvisaciones llamadas revolución. Acabaron con el aparato productivo del país, más de 4 Millones de hectáreas productivas fueron expropiadas, acabaron más de Seis Mil grandes empresas en el campo y la ciudad, y para colmo de males, las pocas que aun existen y producen y que les está sacando las patas del barro, como empresas Polar, los amenazan con expropiarlos a cada instante, en vez de ofrecer garantías para la producción y la inversión.
En Venezuela hay una caída de la producción nacional que abarca un 80%, y la importación de los productos de primera necesidad se hacen insuficientes ante la gran demanda que existe, y vuelvo y repito aquí no hay ninguna guerra económica sino una economía de guerra, que ya nos asemeja con países cuyas economías han sido insuficientes y han tenido que depender de las dádivas de otras naciones para subsistir.





El 11.3% de los venezolanos hoy sólo pueden hacer dos comidas y si acaso, porque simplemente el sueldo y la inflación que amenaza con llegar al cien por ciento, no alcanza para adquirir alimentos, medicinas o cubrir cualquier imprevisto. La canasta básica se ubica casi en 30 Mil bolívares mensuales, y díganme ustedes, en un país donde la mayoría gana un sueldo mínimo o un poquito más, cómo hacen para alimentarse bien y con calidad. No obstante, ahora el gobierno inventó que los venezolanos estamos muy gordos y es porque comemos mucho, esto es una falta de respeto para el pueblo y para su dignidad. No obstante, los altos funcionarios y los enchufados sí están bien buchones y repuestos, porque ellos comen sin límites lo que quieran y tienen garantizadas las colas en aviones del Estado y las divisas sin control para ir a hacer mercado a Aruba, las islas del Caribe donde no hay problemas de escasez.

Es muy simple, sí acabaron con el aparato productivo, si muchas empresas tuvieron que cerrar sus puertas por la presión y por la falta de apoyo del gobierno y encima de eso, se robaron en un año más de 25 Mil Millones de Dólares a través de Cadivi, que eran supuestamente para la adquisición de alimentos, medicinas, repuestos para vehículos y otros insumos de primera necesidad, como no va a agudizarse la crisis, precisamente en estos sectores, sin que veamos la menor rectificación del gobierno en asumir sus culpas, sino para ellos es más fácil, echarle la culpa a otro o inventar un cuento cada cierto tiempo para desviar la atención, pero te digo Nicolás, que el pueblo se cansó de pasar trabajos y necesidades basados en una supuesta cuota a la revolución, mientras los altos funcionarios y enchufados del gobierno se dan la gran vida sin restricción alguna.

Recientemente, Nicolás Maduro muy ofuscado y en cadena nacional, le dijo a Iris Varela que se prepare para disponer de cárceles para los burgueses parasitarios, a su juicio, causante de todas las desgracias de este país. Pues bien, yo emplazo a Maduro a que utilice las mismas cárceles, para encerrar a los corruptos y enchufados de este gobierno que han desfalcado a la nación. Cuando están dentro del proceso son grandes próceres pero cuando se les van de las manos o pierden control sobre ellos, son traidores a la patria. Tal es el caso del Mayor General Hebert García Plaza, quien nada más y nada menos fue puesto por el propio Nicolás para controlar y enfrentar la supuesta guerra económica, pero el compatriota se enlodó en la adquisición de tres ferrys, compraron tres chatarras en 50 Millones de Euros y ahora andan con el cuento que el alto gobierno no sabía nada, y nuevamente, involucran a unos cuantos chinitos “recadi”, pero los grandes peces no caen. En este sentido, es vergonzoso ver a Eduardo Samán decir que a García Plaza se le notaba que era de la derecha, por Dios, ya basta de justificar lo injustificable, y de querer tapar el sol con un dedo.

Este gobierno ha sido manejado por mafias y cárteles que se están acabando entre ellos por mantener el poder a cualquiera que sea el precio, incluso a costillas de la vida del pueblo venezolano. A medida que pasen los días, esta crisis será peor, y por ende, el gobierno en su desesperación, incrementará la violencia, la persecución, el chantaje y el amedrentamiento no sólo a los dirigentes que denunciemos tanta atrocidad y putrefacción dentro de las instituciones del Estado, sino contra millones de venezolanos que exigirán justicia y fin a esta guerra generada por ellos mismos. Pero por más que hagan o amenacen, las cartas están echadas, aquí nadie cree en el gobierno y mucho menos en Nicolás Maduro, porque traicionaron la confianza de un pueblo sin importarles nada, de hecho hoy más del 70% de los venezolanos quieren un cambio político en el país.

Es por ello que insisto que una nueva mayoría de la unidad democrática de este país en la Asamblea Nacional, significa el final de esta tragedia y el inicio del gran cambio que ha de darse en este país, y nos ha de llevar a una salida en el marco de la Constitución, desde allí no sólo podremos legislar en función y para beneficio del pueblo, sino que desde allí exigiremos que se nos rindan cuentas de todos los dineros del Estado desviados en el camino y utilizados para proyectos personales y obscenos de los grandes enchufados de la revolución. Tenemos una oportunidad única, y con mucha fuerza, tenemos que salir a votar por la opción de la unidad democrática que es la única garantía constitucional para que esta cruda realidad cambie.

Ismael García
Diputado a la Asamblea Nacional
Primero Justicia
@ismaelprogreso