Decenas de personas fueron detenidas después de los disturbios la noche del viernes en la costa oeste de Estados Unidos, principalmente en Seattle y Oakland, durante manifestaciones antirracistas vinculadas a la muerte de un joven negro en Baltimore (este).
En Oakland, cerca de San Francisco, la calma regresó la mañana del sábado después de los incidentes violentos registrados al final de una manifestación por el Día Internacional del Trabajador con el lema de la brutalidad policial contra la comunidad negra, señaló la policía en un comunicado.
Al menos una decena de personas fueron arrestadas, luego de que algunos individuos de un grupo de 300 a 400 manifestantes que se dirigían al centro de la ciudad “cometieron varios actos de vandalismo” rompiendo vitrinas, escribiendo graffitis, prendiendo fuego y negándose a dispersarse, indicó la policía.
La noche del viernes, la policía tuvo que pedir refuerzos en Oakland, que fue escenario de disturbios en 2010 después del homicidio de un negro en manos de un policía blanco.
En Seattle (noroeste) otros 16 manifestantes fueron detenidos durante una protesta “sin permiso y que se tornó violenta”, dejando tres policías heridos, detalló en un comunicado la policía de la ciudad.
Los incidentes ocurrieron luego de manifestaciones pacíficas bajo el lema “Black Lives Matter” (“la vida de los negros importa”), un eslogan antirracista de antaño retomado tras la muerte de Freddie Gray, de 25 años, el 19 de abril en Baltimore (este).
El joven murió una semana después de ser arrestado y de sufrir heridas graves en un transporte de la policía. La fiscal del estado de Maryland anunció el viernes que acusará de cargos criminales, como homicidio involuntario, a seis uniformados por la muerte de Gray.
Los manifestantes en Seattle arremetieron contra comercios y vehículos y luego lanzaron piedras o botellas a la policía que intervino. AFP