El chico se ha puesto en contacto con oficiales de policía para regularizar la situación de la mujer, puesto que, aunque la construcción de esta pequeña casa es todo un avance, no puede vivir estacionada en la calle. Su gesto revela inmensa preocupación y consideración por los más necesitados.
Este hombre se dio cuenta de que una mujer de 60 años vivía en la calle, en su propio vecindario. Decidió hacer algo por ella: construirle una casa. Y aunque esta te parezca demasiado pequeña o demasiado estrecha, para ella lo significa todo: resguardo y protección. Acciones como estas nos enseñan que nunca es tarde para hacer algo por el resto:
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