El pasado 5 de noviembre, Jorge Arreaza anunciaba la “reactivación” de la planta planta de Guacara de la empresa Clorox, también afirmó que “próximamente será reactivada la empresa Clorox con sede en Santa Lucía en Valles del Tuy, estado Miranda, así también la de esponjas de lustrillo” De eso hoy se cumplen hoy 6 meses, tiempo por demás suficiente para presentarle al pueblo venezolano un balance de la recuperación y de lo producido hasta la fecha.
“Vamos a apretar este botón para dar inicio y reactivar el llenado del cloro que va a ir para los hogares venezolanos“, dijo en ese entonces Jorge Arreaza, acompañado de un grupo de trabajadores de la empresa.
“Si los trabajadores están pidiendo la ayuda, y los burgueses abandonaron la fábrica, pues la estamos recuperando“, indicó Arreaza en una de las plantas de Clorox, ubicada en Guacara, a unos 140 kilómetros al oeste de Caracas.
La toma de las instalaciones se produjo el 26 de septiembre pasado, cuatro días después que Clorox anunciara que estaba cerrando sus operaciones en Venezuela, alegando restricciones por parte del gobierno, interrupciones de suministro y la incertidumbre económica.
Clorox —que en Venezuela fabricaba una amplia de productos como Clorox, Pine-Sol, Mistolín, Lustrillo, Nevex, las bolsas, envolturas y recipientes Glad — subrayó entonces que desde hace casi tres años su filial Corporación Clorox de Venezuela S.A. había tenido que vender más de dos terceras partes de sus productos a precios congelados por el gobierno venezolano.
En junio de 2014, el entonces ministro del Poder Popular para el Comercio, Dante Rivas, luego de una inspección a la empresa declaraba “En la inspección realizada esta empresa pasó la prueba, está cumpliendo con los precios justos, con establecer sus costos y gastos de forma razonable para establecer un precio accesible para la población”
Para ese momento, la Corporación Clorox de Venezuela comercializaba utensilios de limpieza con una participación en el mercado nacional de 40% en cloro, 52% en el de limpiadores desinfectantes y 98% de la esponja jabonosa, además que contaba con una plantilla de más de 490 trabajadores.
Los productos Clorox están desaparecidos
Seis meses después de la “reactivación” lapatilla.com realizó unas visitas a 6 establecimientos del área metropolitana de Caracas donde era habitual encontrar productos fabricados por Clorox de Venezuela.
Las evidencias eran las mismas en todos los establecimientos. No se encontraron en los anaqueles productos Mistolín, Clorox, Nevex o PineSol. En uno de ellos vimos una pequeña cantidad de esponjas Lustrillo.
A mediados del año 2014, los productos de Clorox de Venezuela tenían una presencia permanente en los locales del país. Ahora, brillan por su ausencia.
El gobierno de Maduro tiene hoy la oportunidad de mostrarle al país la producción de los activos de Clorox en sus manos y que la misma tiene la presencia en los anaqueles que tuvo cuando era privada. Arreaza, unos de los propulsores de la “guerra económica” tiene acá la oportunidad de desmentir a aquellos que aseguran que ese término es sólo propaganda del gobierno para ocultar sus propios fracasos e ineficiencias.
Mientras tanto, en los establecimientos visitados, nos contestaron de manera casi idéntica:
– Y los productos Clorox?
– ¡Qué va!
– Eso más nunca salió
(lapatilla.com)