Sequedad y nada más. Así se resume la situación por la que atraviesa Upata desde hace siete días: una semana de interrupción del servicio de agua por tuberías que tiene como núcleo el lago de Guri, mientras que desde los organismos competentes aún no existe una información que satisfaga la tranquilidad de la población afectada, reseña Correo del Caroní.
La desesperación por la falta del servicio ha llevado a los habitantes de la ciudad a manifestar su enojo con protestas pacíficas de forma espontánea, como ocurrió entrada la noche del miércoles, cuando la gente tomó la calle y cerró el paso vehicular en varios lugares del pueblo.
Mostrando pancartas, golpeando cacerolas y gritando consignas por una solución urgente al problema, salieron. Hasta el cierre de esta edición, no había protesta en la capital de Piar.
Falta de información
La opinión pública local ha polemizado al respecto durante los últimos días. Mientras la gente espera porque el agua fluya de nuevo por los tubos de sus residencias y se acabe con la frustración e impotencia que significa no tener el servicio, no saben a qué atenerse debido a la falta de información oficial: alguien que comunique lo que está pasando realmente.