Solo un régimen gorila utiliza a más de 100 hombres armados y encapuchados para entrar a la oficina de la primera autoridad de Caracas para llevárselo detenido sin explicación alguna, solo partiendo vidrios, dando golpes y empujones como carta de entrada para poder someter al alcalde Ledezma.
Maduro ordeno la cárcel de Ramo Verde como centro de reclusión para el alcalde pero no pudieron doblarle la moral, no lograron arrodillar sus principios libertarios y eso lo vio el mundo, la fuerza espiritual que mostro Antonio Ledezma dentro de la prisión puede ser comparada con la que mostro el líder Sudafricano Nelsón Mandela, que fue el de la altives y el honor por defender al país con sus convicciones democráticas.
La cobardía de la revolución bolivariana se hace presente cuando el alcalde Ledezma tuvo que ser operado de emergencia por presentar fuertes dolores en una hernia inguinal y al salir de la operación le ordenan casa por cárcel como medida de presión y amedrentamiento.
En este mismo sentido podemos señalar que los jerarcas del gobierno en un juego ruin y perverso le exigen al alcalde Ledezma que para poder salir de la prisión debe irse de Venezuela y abandonar la lucha que por años ha venido dando desde las filas de la oposición democrática. Pero no contaron con la fortaleza de un guariqueño que está batallando por el futuro del país y no piensa irse cobardemente a otro nación para que los demás peleen por él.
Basta de tanto atropello contra dirigentes de oposición ante el silencio cómplice de propios y extraños, es el momento para levantar la voz de protesta por aquellos que en un momento dieron su voz por los más débiles y en este momento necesitan un coro de voces para exigir su libertad.
Dejar en el olvido a estos amigos y hermanos y es hacerle un favor a los gorilas del régimen de Maduro. Que retumben las calles exigiendo libertad para los presos políticos, que no exista un día más de rendición en las filas de la oposición democrática, que cada paso que se dé sea en función de salir de este nefasto gobierno y que nuestros hermanos presos tengan las calles como expresión libertaria y los sueños por los que pelearon se cumplan.
Dejar morir en prisión a los presos políticos por cálculo político es lo más bajo que partido alguno pueda realizar en esta gesta política entre el bien y el mal.
@felixvelasquez