La FIFA rechazó que su secretario general Jerome Valcke u otro antiguo dirigente “estén implicados en el inicio, aprobación e implementación” del proyecto por el que el Comité Organizador del Mundial de Sudáfrica 2010 hizo un pago de 10 millones de dólares a la CONCACAF.
En un comunicado hecho público este martes, la FIFA aclaró que “en 2007, como parte de la Copa del Mundo de 2010, el gobierno de Sudáfrica aprobó un proyecto de 10 millones de dólares para apoyar la diáspora africana en países del Caribe como legado del Mundial”.
Por parte del gobierno de Sudáfrica, y de acuerdo con la Federación de Fútbol de este país (SAF), se pidió a la FIFA que procediera a retener los 10 millones de dólares del presupuesto del Comité Organizador y los utilizara para financiar el “Programa Legado Diáspora”.
“La SAFA instruyó a la FIFA que el Programa Legado Diáspora debería ser administrado y aplicado directamente por el presidente de la CONCACAF, que en aquel momento era presidente adjunto del Comité de Finanzas, y quien debería actuar como el fiduciario de los fondos del programa”, añadió la FIFA.
El organismo que preside Joseph Blatter afirmó también que “los pagos totales de 10 millones de euros fueron autorizados por el entonces presidente del Comité de Finanzas y ejecutados de acuerdo a las regulaciones de la FIFA”.
“La FIFA no incurrió en ningún coste como resultado de la petición de Sudáfrica porque los fondos pertenecían al Comité Organizador. Ambos, la Federación de Sudáfrica y el Comité Organizador, cumplieron con las formalidades necesarias para la enmienda presupuestaria”, añadió la FIFA.
La reacción de la FIFA se produce después de que el diario The New York Times haya publicado una información en la que indica que el secretario general de la organización, el francés Jerome Valcke, puede ser la persona que hizo varias transacciones por 10 millones de dólares relacionadas con la red de corrupción revelada la semana pasada.
Según el diario, esos pagos por 10 millones de dólares son una “pieza clave” de las acusaciones de la Fiscalía General de Estados Unidos y los fondos fueron utilizados para pagar presuntos sobornos para que Sudáfrica se quedara con la Copa Mundial de fútbol del 2010.
También señala que Valcke es el “oficial de alto rango” no identificado en el pliego de acusaciones, aunque el documento de la fiscalía no dice claramente que esa persona supiera que se estaba usando ese dinero para un acto de corrupción.
La Fiscalía de Estados Unidos anunció el pasado 27 de mayo cargos contra 14 personas de la FIFA y de empresas que hacen negocios con la organización deportiva por una serie de delitos que incluyen el de crimen organizado. EFE