La periodista de investigación Sebastiana Barráez describe en su columna Sebastiana Sin Secretos en el semanario Quinto Día como dos bandas de criminales malvivientes tienen sometida a la población de Altagracia de Orituco.
El poder de El Juvenal y El Picure
Guárico. Es en Altagracia de Orituco. Están en un toque de queda no oficial; desde las 7 de la noche no se puede estar en la calle. El hampa tiene sometido a los habitantes, a los policías y a los militares. Las petroleras y los comerciantes, son víctimas de vacunas. Hay gandolas entrando y saliendo cargadas con insumos de la industria petrolera, porque están remplazando una tubería de gas. Cada gandola o camión volteo paga, a las bandas del Juvenal y El Picure, Bs.2 mil por viaje, las contratistas hasta Bs.40 mil mensual; meten en nóminas a los luceros que cobran y no trabajan. Los sindicatos no pueden actuar, menos los cuerpos policiales y militares. Hace unas semanas la Termo Eléctrica Ezequiel Zamora, ubicada en la troncal 11, carretera nacional Altagracia-Clarines sector Taguapire municipio Monagas Altagracia de Orituco, fue tomada con granadas y armas de guerra por la banda del Juvenal. Fue una acción suicida y peligrosísima para los trabajadores, porque en ese lugar no se pueden accionar armas ya que hay tubería de alta presión en gas. El colmo es que ellos dirigen los tramos del gasducto. La semana pasada le dijeron al directivo de las rutas que van a Caracas y San Juan, Valle de La Pascua y Valle de Guanape que cada socio debe pagar Bs.5 mil, también las dos líneas de autobuses.
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