Después de un mes de espera el Palacio de Kensington publicó las primeras imágenes oficiales del Príncipe Jorge con la Princesa Carlota. Más allá de las tiernas instantáneas, llamó la atención que la Familia Real no recurrió a un fotógrafo oficial sino que fue un familiar quien fotografió a los pequeños, específicamente la Duquesa Catalina de Cambridge. Sin embargo esta no es la primera vez que Doña Catalina publica de forma oficial sus fotografías.
La duquesa ya había publicado alguna de sus instantáneas en el año 2012, cuando fotografió la selva de la isla de Borneo en el sudeste asiático. A través de la página oficial de los duques de Cambridge, la duquesa ha mostrado así una de sus pasiones.
Las fotografías fueron publicadas el 20 de noviembre de 2012. El álbum está compuesto por siete imágenes de la selva de Borneo, la mayoría en blanco y negro. Según la información publicada, la mayoría de las instantáneas las realizó la Duquesa en un paseo privado en el Valle de Danum. Una de las fotografías fue realizada desde una avión, por lo que se aprecia el pico del Monte Kinabalu, el punto más ato de la isla.
Doña Catalina también ha sido fotografiada en algunas ocasiones usando su cámara personal en algunas visitas oficiales, como en un viaje a Canadá en el que no se despegó de su cámara.
En la página oficial de los Duques se menciona la fotografía como una de las aficiones de la Duquesa de Cambridge, que tiene el grado en Historia del Arte por la Universidad de St Andrews. «El entusiasmo de la Duquesa por la fotografía la ha llevado a ser vista tomando fotos como parte de su rol mientras trabajaba en Party Pieces, una empresa propiedad de sus padres», se puede leer en el perfil público de Doña Catalina en su página oficial.
Esta afición podría haber sido «heredada» de su padre, Michael Middleton, el autor del primer retrato de familia de los Duques de Cambridge con su primogénito en 2013. Catalina de Cambridge, con estas acciones, se ha distanciado de la tradición de la familia real que hasta ahora había utilizado a fotógrafos famosos para capturar las primeras imágenes de los «bebés reales».