Estudios de la Universidad de Wisconsin confirman que los conocidos “crunches” activan el recto abdominal y los oblícuos externos mejor que cualquier otro ejercicio. Pero esto es solo si sabes hacer abdominales de la forma correcta, y lo más probable es que estés cometiendo uno o dos errores en tu forma de hacer esta actividad, viendo resultados insatisfactorios.Reseñó la.eonline
Toma nota para que no sigas cometiéndolos…
Problema 1 Subes demasiado: Cuando haces crunches, la idea es que no subas todo tu torso, ya que este sería otro tipo de ejercicio abdominal, trabajando además del recto abdominal, la espalda.
Solución: Enfócate en traer las costillas hasta tu ombligo. Solo levantarás el pecho unos centímetros, y ese pequeño movimiento es todo lo que necesitas para que el ejercicio se dirija directamente a tus abdominales
Problema 2 Tiras de tu cuello: Las manos y los brazos no deberían ayudarte a hacer el abdominal, y tampoco debes crear tensión en el cuello.
Solución: Mientras haces tus contracciones, trabaja en mantener un espacio del tamaño de una manzana entre tu barbilla y tu cuello todo el tiempo. Y si todavía sientes que tiras de tu cuello, prueba colocando los brazos entrecruzados en el pecho o las puntas de los dedos alrededor de las orejas. Apunta tus codos hacia adelante, o si quieres darle un poco más de dificultad al ejercicio, lleva los codos a cada lado.
Problema 3 Piensas más en el impulso que en el ejercicio:Muchos piensan que mientras más rápido hacen las repeticiones mejor, y la realidad es que por hacerlos apresuradamente tomas impulso y hay más riesgo de lesión en la espalda.
Solución: Mantén tus movimientos lentos y controlados, y al final de cada repetición, lleva tu espalda derecha firmemente contra el suelo.
Problema 4 Te relajas al bajar: Un error común es hacer mucho esfuerzo para subir haciendo los abdominales, y relajando el estómago al bajar. Si haces esto, estás saltándote la mitad del trabajo, y los beneficios.
Solución: Aprieta los músculos abdominales para levantarte a ti mismo del piso, y mientras bajas, continúa haciendo fuerza con ellos. Concéntrate en tus músculos abdominales para bajar lentamente, en vez de caer al suelo.
Problema 5 Aguantas la respiración: Si privas a tu cuerpo de oxígeno tus crunches van a ser mucho más difíciles de lo que te imaginas.
Solución: Exhala mientras vas subiendo y automáticamente inhalaras al bajar. Te damos otro truco: si exhalas con fuerza durante la contracción, también activarás los músculos abdominales más profundos durante el movimiento.