El jefe del gobierno español, Mariano Rajoy, aseguró este miércoles a los medios españoles que “no se descarta ninguna hipótesis” en la desaparición de tres periodistas cerca de la ciudad siria de Alepo.AFP
“Lo único contrastado a día de hoy es su desaparición”, añadió Rajoy, tras intervenir en un foro económico en Andalucía (sur de España), en unas declaraciones confirmadas por fuentes gubernamentales.
Previamente, el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, había asegurado en Madrid que por ahora “no hay reivindicación” de un posible secuestro mientras pedía prudencia a tenor de las informaciones aparecidas que apuntaban a tal extremo.
Su ministerio, afirmó, está “en plena actividad” para encontrar a los periodistas desaparecidos, manteniendo un contacto constante con la embajada española en Turquía, encargada de las operaciones en Siria, y sus agentes de inteligencia en la zona.
El martes, la Federación de Asociaciones de la Prensa de España (FAPE) anunció la desaparición de los periodistas ‘free-lance’ Antonio Pampliega, nacido en 1982, José Manuel López, nacido en 1971, y Ángel Sastre, de 35 años, todos ellos curtidos en la cobertura de guerras.
Los tres se adentraron en el país para cubrir el conflicto en la ciudad nororiental de Alepo, devastada por los numerosos combates entre diferentes facciones. Desde el 12 de julio, no se sabe nada de ellos, señaló la FAPE.
Siria está considerado el país más peligroso del mundo para los periodistas, según Reporteros Sin Fronteras (RSF). Esta ONG señala que 44 periodistas murieron desde el inicio de la guerra civil en ese país y otros 30, entre ellos 9 extranjeros, están desaparecidos o secuestrados por grupos armados extremistas.
RSF emitió un comunicado mostrando su preocupación por la situación de estos periodistas y llamó “a todas las partes del conflicto a respetar el trabajo de los medios y parar de tomar rehenes con fines políticos”.
España ya vivió en 2013 el secuestro de tres periodistas en ese país, liberados en marzo de 2014 tras seis meses retenidos por el grupo Estado Islámico.