El momento más esperado de la visita de Barack Obama en Kenia se ha producido esta mañana, cuando se ha dirigido a la nación en un discurso televisado en el principal estadio deportivo de la capital del país, Nairobi.
Por Carolina Valdehíta para El Mundo (España)
Después de haberse reunido con líderes de la sociedad civil esta mañana, Obama se ha dirigido especialmente a la juventud, la cual ha destacado como la principal fuerza para el éxito del país y del continente. “Yes youth can!”, (sí, la juventud puede), ha aclamado entre el júbilo de los asistentes. Presentado por su hermana por parte de padre, Auma Obama, el presidente de Estados Unidos no ha tenido problemas para hacerse rápidamente con el público.
Ellos ya se había rendido a sus pies en el momento en el que anunció que no terminaría su legislatura sin visitar el país de sus padres. Obama ha contado a los asistentes una anécdota sobre el primer viaje que realizó a Kenia: “La primera vez que vine a Kenia hace 30 años me perdieron la maleta en el aeropuerto. Mi hermana me vino a buscar en un Volkswagen escarabajo que se rompió cinco veces durante el trayecto hasta su casa, donde dormí en su sofá. Hoy he venido en el Air Force One, donde nunca pierden mi equipaje”.
Pronto se adentró en las raíces de su familia y de los esfuerzos que hicieron en su vida su abuelo y su padre. “Mi padre tuvo el privilegio de ser aceptado para realizar sus estudios de economía en el estado de Hawai y posteriormente trabajó en el gobierno del país. Pero sé que estuvo gravemente frustrado porque no pudo reconocer las ideas que él había aprendido y que defendía en el gobierno que había en el país”.
“No siempre las traiciones son buenas”
Su discurso ha estado colmado de optimismo y de ánimos a la juventud del país para que persigan sus sueños: “No hay límites que no podáis alcanzar. Tenéis que construir vuestro futuro aquí y ahora y tenéis que preguntaros cómo podéis construir un mundo mejor”.
Sin querer adentrarse de nuevo en la causa por los derechos de las personas homosexuales, Obama ha sentenciado: “Cada país tiene sus propias tradiciones, pero no quiere decir que porque algo sea parte del pasado siga siendo bueno“. Rápidamente lo ha relacionado con el tratamiento que han recibido las mujeres y las niñas a lo largo de la historia. “No se puede permitir el seguir tratando a las mujeres y a las niñas como ciudadanos de segunda. Hay que acabar con la violencia doméstica, con la mutilación genital femenina y con los matrimonios forzados. No hay lugar para estas cosas en el siglo XXI”.
También se ha centrado en alabar los valores comunes entre ambos países y en defender la democracia, la transparencia y la inversión. Ayer Obama alabó la constitución keniana como una de las más progresistas del continente porque permite la libertad de expresión y prensa, algo que considera “primordial” para un correcto desarrollo de un estado. Hoy lo ha vuelto a hacer aunque ha dicho que el progreso no será completo hasta que no desaparezca la corrupción. Sin embargo, no ha querido hacer más sangre sobre el presidente Uhuru Kenyatta, cuyo gobierno está siendo investigado por tribunales internacionales precisamente a causa de este mal. “La corrupción no es única en Kenia, no hay ningún país en el mundo que esté completamente exento de ella, sobre todo en África, donde siempre se ha visto como una costumbre”. También ha dicho que no sólo implica a la clase política, sino que cualquier forma de corrupción por pequeña que sea debe de ser atajada.
Puntos en común
Ayer ambos presidentes dieron una rueda de prensa conjunta de una hora de duración en la que respondieron a las preguntas de tres periodistas. Durante la comparecencia, ambos gobiernos se mostraron muy cercanos y dijeron que seguirían colaborando en su lucha contra el terror de Al Shabab.
También destacaron sus futuras colaboraciones en materia económica, en las que facilitarán el acceso al país de los viajeros americanos, ya que hay muchos estudiantes que realizan algunos meses de prácticas en ambos países. También Obama ha señalado que ayudarán a Kenia en mejorar sus fuentes de energía, ya que es consciente de la problemática que supone en el país. Aunque no han sido capaces de establecer una fecha para desarrollar todos estos proyectos, Obama ha asegurado que esta colaboración continuará después de que él finalice su legislatura, el año que viene. Por otro lado, ha querido señalar que las buenas relaciones con el país africano no son nuevas, y que en el pasado sus homólogos en la Casa Blanca ya hicieron buenas políticas entre los dos presidentes.
Obama tiene previsto trasladarse esta tarde a Etiopía, donde tendrá la ardua tarea de hablar sobre derechos humanos en un país en el que están prohibidos los partidos de la oposición y donde la libertad de prensa es inexistente.