Para fines de octubre de 2014, la mayoría democrática y absoluta del Consejo Universitario de la Universidad Central analizó dos graves temas. La dictadura había impuesto un nuevo recorte presupuestario para el año fiscal 2015 sin discusión alguna a nivel del CNU y el Vicerrectorado Académico presentó detalladamente el brutal impacto que generarían esos precarios fondos fiscales sobre todas las actividades académicas de la primera universidad del país.
Alertamos sobre la acentuación del debilitamiento de las plataformas que fundamentan la nueva academia en la UCV concretada progresivamente a partir del inicio de nuestra gestión en el 2008. La devastación se extendería a toda la nómina ucevista y golpearía las otras tres plataformas de funcionamiento: laboratorios y tecnologías, sistemas y redes y el mantenimiento global. Se añade el bloqueo de divisas para becarios en el exterior, actualización e innovación institucional y bibliotecas e información bibliográfica electrónica.
El CU conformó una comisión de docentes expertos provenientes de nuestra Escuela de Economía. Humberto García Larralde, Sary Levy, José Guerra, Nelson Lara y Leonardo Vera elaboraron una tabla de sueldos para nuestros docentes que de aprobarse dignificaría la calidad de vida de toda nuestra nómina.
A mejor calidad de vida, más sólida la calidad de la enseñanza y la investigación. Varios factores fortalecieron la tabla propuesta, resaltando la diferencia del salario de los universitarios con niveles salariales de otros sectores públicos nacionales y la abrumadora referencia de sueldos muy superiores que devengan docentes en numerosas universidades latinoamericanas.
Para principios de diciembre del año pasado, con un dólar a 27 bolívares se propuso que un Instructor a dedicación exclusiva recibiera un salario mensual de 56.000 bolívares y un profesor titular 109.000 bolívares.
Imperturbable permanecía la autonomía universitaria y sin pausa la lucha por que se honrara no solo la vigencia de las Normas de Homologación sino la cancelación de la deuda 2004-2013 por concepto de NH no honrada y se revisara con celeridad la fórmula errada que ha sido empleada por años para calcular las prestaciones sociales y los pasivos laborales. Nuestra Rectora sometió la tabla salarial de la UCV con el apoyo de las universidades públicas autónomas representadas en Averu y de la Junta Directiva de la Asociación de Profesores de la UCV para ser considerada como punto de agenda en el CNU pautado para 16 de diciembre de 2014.
En ese fatídico CNU, el ministro Fernández no solo ignoró y congeló la tabla que beneficiaría cerca de 50.000 docentes y más de 150.000 nóminas universitarias sino que de forma anti reglamentaria aprobó el Sistema Nacional de Ingreso destinado a apoderarse de 100% del ingreso de nuevas cohortes estudiantiles.
Venezuela entera conoce y padece con hambre, crímenes, presos políticos, enfermedades y luto lo sucedido en estos ochos meses de 2015. Infortunadamente los gremios democráticos que hacen vida en nuestras universidades han optado por la Convención Colectiva Única II. Nuestra Asesoría Jurídica demostró en el CU el carácter anti autonómico y sustancialmente antiuniversitario de este fraude laboral oficialista.
Honramos nuestra tabla salarial de 2014 ajustada a julio de 2015. No abdicaremos jamás nuestros derechos y nuestra condición de profesores universitarios seamos activos o jubilados. Defenderemos una vez más con nuestras vidas la autonomía universitaria. No caeremos en la trampa del desacato en el caso de la admisión de bachilleres. Junto con la democracia mundial derrotaremos a la tiranía en las urnas electorales del 6 de diciembre.