Michael Dale, un estadounidense de 44 años, fue detenido el pasado lunes después de que un guardia le encontrase en un cementerio de Stanford (Kentucky) cavando con sus propias manos la tumba de su padre. Según han afirmado varios medios internacionales como el «Daily Mirror», su objetivo era desenterrarle para poder discutir con él por última vez. Una situación dantesca que ha desconcertado a las autoridades locales, según lo resela ABC de España
Este estadounidense se dirigió al cementerio «Pilot Baptist Church» en la noche del lunes. En principio pretendía no llamar la atención. Sin embargo, sus paseos nocturnos alertaron al guardia del lugar, quien, al investigar, le descubrió arrodillado frente a una tumba.
Según explicó uno de los ayudantes del Sheriff a la cadena de noticias «LEX 18», el vigilante le halló bajo los efectos del alcohol y las drogas y, tras preguntarle por qué excavaba, le dijo que estaba tratando de desenterrar a su difunto padre (fallecido en 1983) para terminar una conversación que habían iniciado antes de que falleciera. Al instante, fue detenido y acusado de violar una tumba, intoxicación pública y posesión de cannabis.
Posteriormente, fue entrevistado por los agentes en su celda, donde explicó que no había hecho nada malo y que, una vez libre, volvería al cementerio. «Lo haré de nuevo», señaló. Con todo, las autoridades sospechan que la tumba podría no ser la de su padre, pues hay otros 12 fallecidos en el recinto con el mismo apellido y el protagonista podría no haberse dado cuenta de qué sepulcro estaba profanando.