Pedro Castro Guillen: La pérdida de la sustentabilidad del chavismo

Pedro Castro Guillen: La pérdida de la sustentabilidad del chavismo

thumbnailpedrocastroLa pérdida de sustentación del chavismo se inicio cuando la renta petrolera aún con precios de $98 por barril ya no podía sostener el despilfarro del gasto público, una altísima corrupción y el financiamiento de una política exterior inviable por unilateral y falta de propósitos que no fuera otro que el de comprar voluntades para permanecer eternamente en el poder y, por supuesto, con el deceso del líder supremo. Estos dos acontecimientos han puesto de relieve la gravedad de la crisis económica y política del país.

A lo anterior se agrega que los herederos han sido un verdadero factor que ha agravado y complicado lo que de suyo estaba marcado por el enredo y la falta de salidas. La troika en el poder en lugar de buscar salidas racionales a la insoportable situación de desabastecimiento, escasez, inflación e inseguridad, se embarcaron en la más absurda operación, falta de toda inteligencia y de lógica política, de buscar chivos expiatorios a quien endosarle la responsabilidad del desastre que dejo el difunto.

Estos “culpables” han sido muchos todos los conocemos. Pero resulta notable como comienzan a ser culpabilizados de los males del país, y por ende reprimidos, sectores sociales vinculados al oficialismo como los bachaqueros, los habitantes de barrios populares y de la Misión Vivienda. Hasta llegar al cierre de la frontera con Colombia en el Táchira, que no por ser lo más reciente será el último de los dislates que veremos en este profundo proceso de descomposición del régimen. Hemos visto imágenes que con la excusa de combatir a los paramilitares –los nuevos culpables-  lo que se produce es la expulsión del país de centenares de colombianos pobres, echados del país al mejor estilo de las tiranías que han sembrado el mundo de campos de desplazados y de refugiados. Las imágenes de RCN en donde se le retienen los hijos a una madre colombiana y se le echa del país separándolos  bajo el argumento malvado de que éstos son hijos de Bolívar, es una de las cosas más protervas de todos estos episodios trágicos en que se ha embarcado el chavismo en estos dos últimos años.





Nada de esto ha suspendido la caída vertiginosa del chavismo, el grado de rechazo es del  87% de los venezolanos que creen que el régimen equivoca el camino y más del 50% responsabiliza al gobierno de la mala situación. La diferencia en intención de votos a favor de la oposición es mayor al 25% y es esperable que esta distancia aumente frente a los disparates del oficialismo.

La troika en el poder que no ha logrado conseguir el rumbo, esta espantada frente a la posibilidad real de perder las próximas elecciones parlamentarias, y aún cuando estas elecciones no son para la sustitución del actual gobierno, su pérdida dejaría claro que el chavismo esta derrotado social y políticamente, por el muy legitimo procedimiento electoral aceptable nacional e internacionalmente. Esto es lo que les resulta intolerable y lo que explica en parte la conducta –no el único factor- disparatada del oficialismo.

Las elecciones son una dimensión muy importante del proceso de cambio que ya comenzó en Venezuela, por eso salga a votar y contribuya como ciudadano a recuperar nuestras libertades republicanas y democráticas.

Pedro Vicente Castro Guillen     @pedrovcastrog