El presidente de Fedecamaras Táchira, Daniel Aguilar, precisó que desde el cierre de la frontera, en el área San Antonio-Ureña, el 19 de agosto, se han registrado pérdidas diarias cercanas a los 3 millones de dólares, según publicó el diario La Nación de San Cristóbal, publica La Nación.
“Como consecuencia de la paralización de una gran cantidad de empresas, unas por falta de mercadería y otras por la problemática de que propietarios y parte de la masa laboral habitan pasando el Norte de Santander”, explicó.
Para Aguilar, recuperar la economía en el área fronteriza será difícil, “a no ser que esta decisión, tomada por el gobierno y la que respetamos, viniese acompañada con otras medidas que impulsen el comercio en los linderos colombo venezolanos”.
El titular de la Federación de Cámaras y Asociaciones de Comercio de Venezuela en la entidad tachirense destacó que el cierre de los pasos limítrofes no ha logrado reducir el volumen de las colas de personas para adquirir productos básicos.
“En todas partes hay colas, aquí no podemos decir que hay abastecimiento total o de 50%”.
Considera que el gobierno no debió cerrar los puentes Simón Bolívar, General Santander y Unión. “Esos puentes legales, donde están los funcionarios de la GNB y de otros organismos, no tenían que haber sido cerrados”.
A su juicio, se debió reforzar los controles en los puentes “y permitir el libre traslado de mercadería que se encuentra represada en Cúcuta porque no ha sido legalizada”.
Para concluir, abogó porque los mandatarios de Venezuela y Colombia, Nicolás Maduro y Juan Manuel Santos, dialoguen y logren reabrir la frontera. “Que llegue la sensatez”, concluyó