Los números ya se cuadraron y los Azulejos de Toronto van a los playoffs por primera vez en 22 años.
Aunque el número mágico sigue siendo 1 para asegurar por lo menos el segundo comodín de la Liga Americana, esa derrota de los equipos que compiten contra Toronto está garantizada que ocurra debido a los calendarios restantes de los tres equipos contendientes en el Oeste de la Liga Americana (Vigilantes de Texas, Astros de Houston y Angelinos de Los Ángeles de Anaheim).
Los Vigilantes juegan con los Astros dos veces y con los Angelinos cuatro veces. Puesto de forma simple: No es posible que dos de los equipos del Oeste de la Americana terminen por encima de Toronto, incluso si los Azulejos pierden el liderato de la División Este de la Liga Americana a manos de los Yankees de Nueva York.
El peor record posible para Toronto es de 88-74. Los Astros y los Angelinos ya tiene 74 derrotas y si ambos ganan, los Vigilantes (que juegan para 84-69) tendrán por lo menos 75 derrotas. Si los Azulejos y los dos equipos del Oeste terminan con marca de 88-74, los dos equipos del Oeste jugarían un partido de desempate por el banderín divisional y el perdedor se quedaría con el otro puesto de comodín junto a Toronto.
El equipo celebró su pase a la postemporada con un mensaje en Twitter el sábado en la mañana.
Pero el manager John Gibbons y muchos de los jugadores del equipo no estaban conscientes de que Toronto ya tenía un puesto garantizado en la postemporada hasta que los reporteros se lo informaron el sábado en la mañana.
“Apuesto que pueden encontrar a alguien que no lo sabe”, dijo el receptor Russell Martin al diario National Post. “Te lo garantizo. Alguien no sabe que hemos asegurado el puesto”.
Los Azulejos no habían llegado a la postemporada desde que ganaron su segunda Serie Mundial consecutiva en 1993. Al llegar a los partidos del sábado, Toronto tiene ventaja de cuatro juegos en el Este de la Liga Americana sobre los Yankees, quienes están en posición de ganar el primer comodín de la Liga Americana.
“Ha pasado tanto tiempo”, dijo Gibbons. “Los chicos han jugado de forma grandiosa y realmente le han dado vuelta al asunto en los últimos dos meses. Es un buen sentimiento, pero estamos tratando de hacer mucho más que eso”.
Seattle, quien fue por última vez a la postemporada en 2001, ahora tiene la distinción de ser el equipo con la sequía de postemporada más larga.