Diez personas, entre ellos seis funcionarios de policía y cuatro civiles, resultaron heridos hoy por un ataque con dos granadas perpetrado la urbanización Las Mercedes, municipio Baruta, Caracas.
En menos de 48 horas se han producido cinco ataques con explosivos a comisiones policiales. Además del ataque de este domingo, el viernes fue atacada con granadas y disparos la Base de Homicidios Mariara ubicada en la avenida Libertador, sector La Haciendita, en Diego Ibarra, en Carabobo. Mientras que ayer sábado, a las 4 y 30 de la madrugada, dos sujetos en una moto KLR negra lanzaron una granada a la entrada de la subdelegación de el Cicpc en El Llanito, adyacente a la morgue construida hace un año.
“Esta madrugada, seis funcionarios de PoliBaruta y cuatro civiles heridos en entrada (de la urbanización) Las Mercedes. Les lanzaron dos granadas desde la autopista (Francisco) Fajardo”, escribió el alcalde Gerardo Blyde en su Twitter, reseñó AFP.
Un nuevo ataque se sumó a la lista la tarde del domingo cuando otra granada impactó contra una sede ubicada en San Juan de los Morros, cercana a la plaza Bolívar. Según el periodista Javier Mayorca, un motorizado lanzó el artefacto explosivo.
Posteriormente, según reporte del periodista Daniel Guillermo Colina, en horas de la noche del domingo, dos antisociales a bordo de una motocicleta roja lanzaron una granada contra la Zona 7 de la Policía de Miranda, en La Urbina, Caracas, sin registrarse heridos tras el incidente.
Fotos @notisur24
Blyde agregó que uno de los funcionarios de la policía municipal, de apellido Ochoa y 26 años de edad, está en terapia intensiva porque una “esquirla le ingresó por el ojo derecho y se le alojó en el cerebro”.
Ricardo Sánchez, diputado a la Asamblea Nacional, señaló que el de este domingo responde al mismo modus operandi de otros dos ataques perpretados entre el pasado jueves y viernes contra las sedes de la policía científica de Carabobo (centronorte) y de El Llanito, ubicada en el extremo este de Caracas.
El parlamentario añadió que en los últimos cuatro meses se han producido otros cuatro ataques contra comisarías en los estados Táchira (oeste) y Aragua (centronorte).
Sánchez dijo que las acciones de “carácter paramilitar” tienen el objetivo de “desmoralizar a los cuerpos policiales y lograr que pidan la baja o que se rindan ante el crimen y por supuesto causar un efecto negativo en la población”.
A mediados de julio el gobierno del presidente Nicolás Maduro inició lo que llama las OLP (Operaciones para la Liberación del Pueblo), en las que cuerpos de seguridad del Estado han ingresado en favelas para desarticular bandas criminales y de las que ha resultado el decomiso de armamento de guerra, incluidas granadas fragmentarias.
Según un informe de la Organización de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito, basado en estadísticas de 2012, Venezuela es el segundo país más violento del mundo, con una tasa de 53,7 homicidios por cada 100.000 habitantes.