Más de 15 millones de personas vieron el primer debate demócrata de la campaña presidencial 2016, un récord para el partido aunque nueve millones por debajo del primer cara a cara republicano, según la cadena estadounidense CNN. AFP
En el enfrentamiento que tuvo lugar en Las Vegas entre la ex secretaria de Estado Hillary Clinton, el senador independiente Bernie Sanders y otros tres precandidatos, tuvo 15,3 millones de espectadores, superando las expectativas que predecían cifras de un sólo dígito, informó el anfitrión del debate este miércoles.
Aunque este récord para los demócratas queda muy lejos de los 24 millones de espectadores que registró el primer debate republicano retransmitido por Fox News el 6 de agosto, en el que el favorito, Donald Trump, se enfrentó a otros nueve aspirantes.
Ése fue, con gran diferencia, el debate de unas primarias con un mayor índice de audiencia.
La compañía de audiencias de televisión Nielsen publicará sus datos del debate demócrata más tarde este miércoles.
Nadie preveía un gran éxito de audiencia para el debate demócrata, que enfrentó a Clinton y Sanders con otros tres precandidatos que apenas tienen presencia en las encuestas: el exgobernador de Maryland Martin O’Malley, el exsenador Jim Webb, y el exgobernador de Rhode Island Lincoln Chafee.
Aunque la audiencia habría sido sin duda mayor si el vicepresidente Joe Biden, que aún duda sobre una posible candidatura, hubiera estado en el escenario la noche del martes.