La policía municipal de Tijuana, Baja California, al noroeste de México, encontró en la tarde del martes el cuerpo de un hombre tendido en la acera de un barrio céntrico de la ciudad. Tenía dos heridas de bala en la cara, una en el pecho, otra el vientre y otra en el hombro derecho. La víctima, Guillermo Gastélum Jacques, murió mientras le atendían los servicios médicos. El agresor fue detenido cuando huía por una calle contigua aún con el arma en la mano, un revólver del calibre 40. Se llama Ulises Abraham. Tiene 14 años.
David Marcial Pérez / El País
Tras la detención, el menor dijo a los agentes que no conocía de nada a su víctima y que un desconocido le había ofrecido 31.000 pesos -1.800 dólares- para que le hiciera un “trabajito”, según un comunicado de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal de Tijuana. Abraham está pendiente de juicio por parte del Juzgado Especializado de Justicia para Adolescentes.
El portavoz de la SSP señaló en rueda de prensa que en los últimos meses se ha incrementado el número de menores que participan en hechos criminales en Tijuana. Cuatro adolescentes fueron detenidos la semana pasada por su presunta vinculación con varios homicidios en la zona este de la ciudad.
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