Los colegios electorales cerraron el domingo en Haití en un ambiente de calma, tras una jornada sin grandes incidentes y marcado por una participación sostenida.
Unos 5,8 millones electores estaban convocados a las urnas para la primera vuelta de la elección presidencial, la segunda vuelta de las legislativas y las municipales, con la esperanza de sacar al país más pobre de América de una inestabilidad política crónica.
A pesar de los retrasos ocasionados por problemas logísticos, los electores ejercieron su derecho al voto en calma.
A raíz de los incidentes que empañaron la primera vuelta de las legislativas, el 9 de agosto, la Policía Nacional intensificó sus esfuerzos y las fuerzas del orden fueron visibles en numerosos centros de votación para garantizar la seguridad.
Los resultados no se conocerán hasta principios de noviembre. AFP