El paro de un sector de transportistas de Lima y la vecina provincia del Callao afectó hoy a miles de personas en la capital de Perú y provocó que el ministerio de Trabajo disponga una tolerancia de dos horas para el ingreso a los centros laborales.
EFE
Un sector de transportistas de ambas provincias protestan contra los cinco corredores viales establecidos por la Municipalidad de Lima porque dejará fuera de circulación a unas 1.500 unidades, que no lograron ingresar a las licitaciones públicas.
La reforma del transporte, emprendida desde la anterior gestión municipal, ha encontrado además el rechazo del Ministerio de Economía y Finanzas al declarar nulos los contratos firmados con las compañías a cargo de los corredores porque no cuentan con su opinión y aprobación.
El ministro de Economía, Alonso Segura, explicó ayer que la opinión del ministerio es necesaria debido a que los contratos de concesión pueden comprometer indebidamente los recursos públicos.
Además del paro, los transportistas marcharán hoy hacia el ministerio de Economía y Finanzas en el centro de Lima.
En varios puntos de la ciudad, sobre todos los distritos periféricos del centro de Lima, hubo gran congestión de personas en los paraderos y las únicas unidades circulando eran informales que cobraban casi el doble del pasaje habitual.
Ante esta situación, el Ministerio de Trabajo estableció dos horas de tolerancia en el horario de ingreso a los centros de labores y exhortó a los empleadores a adoptar medidas flexibles que permitan compensar estas tardanzas involuntarias.
Por su parte, el servicio de buses Metropolitano, operado por la municipalidad de Lima, anunció una actividad del 100 % de sus unidades para atender la mayor demanda de viajes por el paro desde el cono norte de la ciudad.