Manuel Corao: Para el hambre circo

Manuel Corao: Para el hambre circo

thumbnailmanuelcoraoJun2015Cada vez que Nicolás Maduro escucha a un alto jerarca de las Fuerzas Armadas Norteamericanas al referirse a la crisis de gobernabilidad en Venezuela, lejos de arengar a los venezolanos abrir trincheras en las playas, prefiere la guerra de micrófonos en la seguridad que el pueblo no se moverá para defenderlo.

Tal circunstancia la pudimos notar una vez más con motivo de las declaraciones vertidas por el General Jefe del Comando Sur, Jhon kelly al expresar que Venezuela está a punto de una implosión social.
La relación entre Nicolás Maduro y Diosdado Cabello es cada vez más distante y con el tiempo ambiciones hegemónicas e intereses diversos auguran un ineludible enfrentamiento por el poder. Maduro mantiene el apoyo de los aliados extra territorio, mientras Cabello solventa su liderazgo entre grupúsculos chavistas en la Fuerza Armada Nacional Bolivariana. En resumidas en Venezuela se sabe quién habla pero no quien manda.

Las aspiraciones económicas de los chinos por ponerle las manos a la industria petrolera están fundamentada en la recuperación incierta de miles de millones de dólares prestados a Hugo Chávez a manos llenas y a Maduro a regañadientes.





Así marchan las cosas en un país donde a criterio de sociólogos la crisis obedece a un plan previamente elaborado en los laboratorios cubanos para empobrecer a la nación y convertir a los parroquianos en pedigüeños de los más esenciales bienes primarios y medicinas de necesario consumo para el ser humano.

El gobierno lleva adelante planes para evitar se conozcan a ciencia cierta el destino final de los más de doscientos mil millones de dólares manejados por la administración chavista en los últimos dieciséis años.

Maduro no mitigará el hambre y él lo sabe. Carece de organización para distribuir los comestibles aun si los tuviese. Sin empresa privada no hay distribución eficiente. De igual manera la denuncia sobre la existencia de paramilitares ha hecho que los venezolanos se fijen en este evento.

Los improperios contra USA y la guerra con Guyana son los temas abre boca del año de las perogrulladas para mantener a la población pendiente de otra cosa que no sea el ultraje a la patria. Que decirles de los estados de excepción para evitar el contrabando. Hasta el enfrentamiento y cierre de frontera con humildes pobladores llegaron los corruptos a inventar el combo Chavista- comunista con Colombia. Todo esto amparado por decretos “por la paz” para tomar 23 municipios fronterizos donde cometerán las fechorías electorales.

A toda esta farsa le sigue la persecución de Lorenzo Mendoza de Polar ,también la demanda legal en Maryland a la página Dólar Today que es marcador profesional de la oferta y requerimiento de monedas extranjeras en relación al bolívar fuerte en el mercado de divisas.

Cual trencito se suma el fiscal Franklin Nieves, quien luego de 20 años de ser verdugo del régimen viene a Los Estados Unidos de América, tierra de libertad, para arrepentirse de haber sido instrumento acusador que condujo a dictarle condena de casi 14 años de prisión a Leopoldo López Mendoza.

Cuando estamos al cierre de esta edición y para ocupar los ciudadanos en materias que den hablar, el mandador anuncia otorgar 480 millones de dólares para los Sukoy rusos además de indicar el ministro Wladimir Padrino López la adquisición de una nueva flota aérea armada. No hay comida, tampoco medicinas pero al gobierno eso nada le importa, solo son su botin.

Y así hasta la elección vendrá un circo tras otro. El seis de diciembre mediante la rapiña sembrará de votos a favor del PSUV el escrutinio electoral. Los estados de excepción son territorios fértiles para burlar el votante y violentar las maquinas cuando tomados por los militares y colectivos, en actitud desafiante intimiden a los votantes. Al no asistir ellos al centro electoral, los esbirros electrónicos sustituirán su presencia y harán uso de su inscripción electoral. Ello sucederá en todos los OLP para imponer subrepticiamente sus candidatos.

Analistas políticos expresan que ha sido la meta real del comunismo en Venezuela lucrarse de los recursos del erario público y lo han logrado junto a sus socios externos, testaferros y mamparas impunemente, por ahora.

Para los economistas debemos evaluar la realidad financiera matemáticamente demostrable. Es por esta evaluación precisa por la cual afirman que el estado venezolano está al borde de la quiebra independientemente que se derive ello de la aplicación de programas filosóficos o el robo de los ingresos petroleros por sus administradores directamente o por indiferencia ante el hecho delictivo.
El presupuesto del 2016 es el doble del 2015 y se ubica sobre el billón de bolívares fuertes. Las autoridades financieras estiman los ingresos petroleros en 216 mil millones, mientras que la renta interna en 518 mil millones. Se propone el despacho de hacienda exprimirles con el alza de las tasas impositivas el menguado bolsillo de los particulares.