Francesca Chaouqui, acusada junto al sacerdote Lucio Ángel Vallejo Balda de haber filtrado documentos confidenciales del Vaticano, afirma que fue el español quién grabó conversaciones privadas del papa, según publica este miércoles el periódico La Repubblica.
AFP
“Fue monseñor Balda quien hizo las grabaciones del papa Francisco, yo no sabía nada”, explicó la publicista italiana.
Chaouqui, que fue detenida el fin de semana en el Vaticano y luego liberada cuando decidió colaborar con la justicia, asegura que tiene las pruebas de la implicación de Vallejo.
“Fue él mismo el que dio a escuchar una grabación a los miembros de la Cosea”, la comisión creada para estudiar la estructura económica y administrativa de la Santa Sede de la que ambos formaron parte.
Chaouqui afirma en La Repubblica que estuvo implicada en el caso a petición del sacerdote, que fue amigo suyo y que la había recomendado para formar parte de la comisión.
Sin embargo, tras la publicación de la entrevista, la publicista denunció en su página Facebook que el periodista había utilizado declaraciones suyas sin su acuerdo.
Los arrestos del fin de semana coinciden con la publicación de extractos de dos libros de próxima publicación que revelan la presunta mala gestión y el despilfarro de las finanzas del Vaticano, a partir de los documentos de Vallejo.
Estas revelaciones dan a conocer presuntas malversaciones de fondos que habrían permitido a algunos cardenales vivir lujosamente con dinero destinado a los niños enfermos y a otras obras de caridad.