Los tailandeses celebraban el sábado el 88 cumpleaños de su rey, el monarca del mundo que más tiempo ha estado en el trono. Las celebraciones fueron las más discretas de la historia en el país, tres meses después de la última aparición pública del otrora enérgico monarca, que está hospitalizado.
El rey Bhumibol Adulyadej se veía frágil en su última aparición pública, el 1 de septiembre, cuando hizo una breve salida desde el hospital de Bangkok donde ha pasado la mayor parte de los últimos seis años. Su problema de salud más reciente fue una infección pulmonar que requirió que se le alimentara por vía intravenosa y que se le ayudara a respirar con una máquina.
Se organizaron muchas actividades públicas con motivo del cumpleaños, pero ningún festejo como los que solían celebrarse antes del declive de la salud del rey. Un importante punto de reunión en este año fue afuera del hospital que se ha convertido en su palacio de facto, a donde personas que le deseaban lo mejor fueron a rezar.
Un recordatorio sombrío del paso de su generación llegó la mañana del sábado con el deceso del exministro de Exteriores Siddhi Savetsila a sus 96 años, un miembro del consejo privado, la junta de asesores personales del monarca.
Antes de que empeorara su salud, el cumpleaños de Bhumibol también era la ocasión para un discurso anual muy esperado, en donde expresaba su opinión para ejercer su autoridad como el líder moral del país.
“Ha sido una persona que mantiene a la gente unida; sin él, la gente estaría perdida”, dijo el banquero Thaweewat Chongsuanoiy. AP