Ante los ojos inquisidores de los venezolanos que ansían cambiar sus condiciones de vida, el Hemiciclo se vistió de tricolor y reinó un ambiente de armonía y democracia. Pequeños focos intentaron desviar la atención de quienes cívicamente ejercían sus derechos de palabra, pero nada pudo con la intención de cambio de nuestros diputados, quienes defendieron su investidura y la voluntad del pueblo.
Parece increíble ver a personajes como Héctor Rodríguez y Pedro Carreño hablando de engaños al pueblo y de respetar los intereses de la nación, cuando han sido ellos mismos, quienes se han encargado de dilapidar la dignidad de los venezolanos. Esperemos que sus palabras sirvan para redimirse y asuman el papelón que están haciendo frente al pueblo. Llegó la hora de asumir la derrota, levantar la cara, amarrarse los pantalones y salir a trabajar. El pueblo está cansado de tanta politiquería, lo único que demanda son soluciones a sus necesidades.
Por eso, hoy celebro y brindo por mis amigos justicieros, que Dios y la vida les dé fuerzas para asumir este gran reto que se les viene a partir de hoy. Pido también por el resto de nuestros diputados, integrantes de la Unidad, para que sea el pueblo quien dicte sus agendas y las soluciones a los problemas de los venezolanos, sean lo único que les quite el sueño de hoy en adelante. Pido además por aquellos que nos adversan, para quea humildad toque sus corazones y aprendan a escuchar al pueblo que aún confía en ellos.
Pido porque este momento histórico que hoy vivimos, con la juramentación del cambio y el retorno de la prensa libre al Hemiciclo, se convierta en una constante en todas las instituciones del país y en el corazón de los venezolanos. Que trabajemos todos juntos en beneficio de nuestro país, porque estpy convencido de que esto, es solo el comienzo de una ola de cambios y buenos frutos para todos los venezolanos por igual.
Deseo éxitos y buenos augurios para la nueva directiva de la Asamblea Nacional y para nuestros diputados. El éxito y la esperanza de Venezuela espera por nosotros.
¡Seguimos adelante, éste es solo el inicio de un cambio que es irreversible!