El 13 de marzo de 2012, en reseña del diario El Mundo, Nelson Merentes, presidente del Banco Central de Venezuela declaraba que la inflación en Venezuela caería “a un dígito” en el 2014, que la inflación del año 2012 cerraría entre 22 y 24% y que había que “importar con eficiencia” aquellos productos y servicios que no se produjeran en el país. Pues bien, la inflación del año 2012 fue del 20,1%, en el 2013 de 56,2% , en el 2014 fue de 68,6% y en el 2015 de la astronómica cifra de 270,7% según fuentes internas del BCV. La obligación primaria del BCV de “preservar el valor de la moneda”, es decir del salario, con Merentes y ese directorio ha sido sencillamente burlada. Al dejarlo en el BCV, Nicolás Maduro ratificó y apoyó que Merentes esquilmara el bolsillo a los venezolanos (lapatilla.com)